domingo, 28 de octubre de 2018

ESOS "GIROS" DE LA VIDA

Estuve pensando en todas las ocasiones en las que la vida me sorprendió con sus famosos "giros inesperados", creo que me quede pensando en ello porque esta semana ese proyecto en el que me encontraba trabajando con unos jóvenes, termino de la forma más inesperada, cuando menos lo pensaba. Por supuesto que me causo pesar, pero cuando esos "giros" de la vida o del destino o como tu quieras llamarlo se presentan, uno reacciona de diferentes formas, en esta ocasión en particular me causo un hondo pesar, pero al final uno siempre comprende lo pasajeros que somos en la vida de las personas.
No controlamos la vida, es cierto; pero podemos controlar nuestra forma de enfrentar la vida, creo que uno nunca inicia un proyecto de cualquier índole pensando que tendrá que abandonarlo pero quedan las experiencias, esas que atesoramos en el alma y de las cuales rescatamos siempre lo mejor, aprendemos lo que haya que aprender y continuamos a la espera del siguiente "evento" afortunado, ese que llegó a nuestro camino cuando ni siquiera lo habíamos imaginado.

Hace algunos meses yo no imaginé que trabajaría con jóvenes y que me impregnaría de su entorno, de sus formas de ver la vida, no es lo mismo pensar en la vida a los 17 que años después, me recordó gratamente la persona que fui entonces y las ilusiones que albergaba en mi corazón.

Fue una experiencia muy grata y espero que haya podido dejar al menos una pequeña huella en ellos, porque finalmente para eso es que yo inicio cualquier tarea, proyecto o trabajo; para poder dejar una huella al menos en una sola persona, hace mucho que comprendí que si logró hacer que una sola persona pueda ver la vida tal cual es y conseguir ser feliz con ello, me consideraré la persona más afortunada.

Esta semana elegí compartir contigo, esta nueva experiencia que me tocó vivir, elegí decirte que tal vez los "finales" se presenten de la forma más abrupta, pero las cosas inician de la misma forma!!!, no sirve de nada quedarse pensando o lamentando por todo aquello que se fue, la vida sigue y es en esa perspectiva que debemos mantenernos, seguir con lo que estamos haciendo, pero alegres porque este "viaje" sigue, porque más adelante habrán nuevos rostros, nuevas tareas, cosas nuevas que nunca habíamos imaginado.

Después de todo, esos "giros" de la vida siempre se producen en sentido positivo, o nos dejan experiencias y lecciones que nunca olvidaremos o nos llevan a la siguiente aventura, una que nunca habríamos imaginado. La vida sigue y si fuimos felices lo seguiremos siendo de otra forma, con nuevas personas, en nuevos lugares.

Ahora quiero que recuerdes vivir este presente que tienes en tus manos tan tangible como poder mirar a la persona que amas y decirle cuan importante es para ti, como poder disfrutar de lo que estas haciendo en este momento. 
Ayer alguien me dijo que uno no le pone plazos a la felicidad y creo que es cierto, no esperes a "ese mañana" que indudablemente llegará y lo hará con todo aquello que ni siquiera imaginaste, simplemente disfruta tu momento, este "instante" que vives, que nada consiga distraerte de ello.

"Crecer es saber que los días grises también forman parte del decorado"
(Marwan)



domingo, 21 de octubre de 2018

NO ES EL "CAFE", ES LA COMPAÑIA

Hace unos días alguien me contó que un día de tantos, llevada por la prisa tomó un taxi, conocía a la perfección lo que debía cancelar hasta su destino, pues esa ruta la había hecho con anterioridad en varias ocasiones, "siempre por el mismo precio" me decía mientras yo me preguntaba a dónde conducía la historia, imagino que igual que tú en este momento.
Esta persona continuó su relato diciéndome que el conductor del taxi era una persona mayor, cuando finalmente llegó a su destino le ofreció un billete que representaba el doble de su tarifa, a la espera de que le entregue el cambio, cuando finalmente el conductor lo hizo, esta persona descubrió que el conductor le cobro la tarifa normal más el doble de la misma, "el conductor sabía que me estaba cobrando demás porque esperó a que yo le reclamará" me dijo; para mi sorpresa esta persona no estaba enfadada, no estaba alterada en modo alguno, pero sí se veía triste. "Yo no le reclame, agarré el dinero y me fui, el resto del día no deje de pensar cómo era posible que una persona llegue a los años de ese hombre para engañar de esa manera", entonces comprendí su tristeza; "tu me dices que es posible que las personas cambien para bien, yo creo que nunca lo harán", su mirada se torno gris mientras me miraba a la espera de una reacción de mi parte, yo atiné a decirle, ¿sabes por qué creo que es posible mejorar este mundo?: Porque existe gente como tú.

Lamento que las pocas personas que tratan de hacer lo correcto tengan que pasar por este tipo de experiencias, pero es cierto; la mayoría de las personas se han enfermado de codicia y falsedad, de entre muchos males que hoy son muy comunes, con franqueza me preocupa que estas enfermedades del alma, luego se transmiten de generación en generación, porque una sola acción enseña mucho más a un niño que mil palabras.

Uno ve a las personas y se pregunta ¿por qué es tan difícil ser simple?, porque pensamos en regalos costosos, porque llenamos nuestra casa de lujos, porque preferimos gastar cantidades enormes de dinero en vestimenta, autos o lo que fuera. ¿ Por qué nos preocupa más la marca del café que la persona con la cual lo estamos compartiendo?.

¿Saben cómo llegue a hacerme esta pregunta del café?, primero porque participé de una reunión "social" a la que asistimos por lo menos unas 10 o 12 personas, el tema de dicha reunión de "amigos" se centró en la marca del café que la mayoría estaba degustando, la persona que nos invito comentaba cómo había comprado el café en uno de sus muchos viajes, mientras yo miraba las caras de las personas que resaltaban el sabor del café, yo no podía comprender cómo era posible que estemos pasando tiempo de nuestras vidas de esa forma.
Entonces comprendí que no es el "café" es la compañía; porque pensé en una persona a la cual quiero con el alma y que desafortunadamente esta muy lejos de mí, pensé que yo podría tomar un vaso de agua con esta persona sintiéndome inmensamente feliz, porque finalmente tendría la oportunidad de conversar con esta persona de cerca, no; no es el "café" es la compañía.

A mis años valoro que aún hayan personas que son capaces de dejar un trabajo seguro porque priorizaron el tiempo con sus familias o porque creyeron que no era un buen trabajo para ellos, valoro que hayan personas que no piensen en el precio del regalo sino en la persona que se los entrega, valor que aún hayan personas que sienten tristeza cuando ven a otra engañando, valoro que hayan personas que aún hacen un trabajo honesto y defienden lo que es justo; creo que  personas así aún existimos en el mundo, que posiblemente no la estamos pasando lo mejor posible, pero indudablemente cada uno de nosotros somos verdaderos tesoros y quizá por ello seamos pocos.

Porque sé que aún existen personas con tales cualidades, que merecen ser llamados Seres Humanos, es que creo que este mundo puede ser mejor.



domingo, 14 de octubre de 2018

¿QUE HARAS CON EL RESTO DE TU TIEMPO?

Recuerdo especialmente la primera vez que ofrecí una conferencia, llevaba por título "la alegría de estar vivos" y agradezco que me haya tocado un público muy receptivo, posteriormente dí muchas más, incluso la misma a diferentes públicos, pero esa en particular se queda grabada en mi alma, porque era la primera vez que me dirigía a un público presente para hablar de temas relacionados a la vida y ese lado que dejamos de ver por las prisas de la vida: El Alma.
Lo había hecho con anterioridad, pero se trataba de un programa radial, una vez a la semana;. Al finalizar, recibía llamadas de personas a las que les había gustado mucho el tema que se había tratado, mi alma se llenaba de emoción al saber que había conseguido afectar las vidas de aquellas personas al menos un poco para bien, pero aquel día pude ver sus reacciones en persona, la emoción que sentíamos todos!!.

Hoy no se cumple un año más de aquella conferencia, no: entonces ¿por qué te comparto ese momento? porque decidí que esta semana te recordaría que aveces dejamos pasar esos momentitos en los que estuvimos felices y en cambio acumulamos la pesada carga de los días cotidianos que se suman uno tras otro.

Si no modificamos comportamientos, la pesadez se acumula con los años hasta que el agotamiento nos pasa una factura muy costosa: Nuestra salud.
Nuestra salud emocional y por ende la salud física; quiero que mantengas ese orden en tu mente porque el alma empieza a enfermar antes de que se manifiesten las enfermedades físicas. Alguien por ahí me dirá que el alma no puede enfermar, menos aún morir; claro estaría en la razón, pero el alma enferma cuando deja de comunicar cosas, cuando deja de hablarnos, cuando en suma dejamos de alimentar al corazón con todas las emociones positivas que dejamos de sentir, y muere cuando uno ya no es capaz de sentir nada bueno.

Y finalmente he llegado al tema del cual quiero escribir hoy, esa palabra en la que a nadie le gusta pensar y sin embargo esta cobrando más vidas año tras año, la enfermedad; se a cual sea ésta.
Haciendo un pequeño estudio en mi entorno llegué a la conclusión de que ya no existe nadie que no conozca al menos a una persona que este enferma de algo y quiero recalcar en ese "algo" porque a veces engañamos a la mente cundo decimos "es solo un dolor de cabeza" o "es solo un resfriado".

Lo cierto es que las alarmas de nuestro ser deberían encenderse ante cualquier malestar, pero dejamos pasar el tiempo, seguimos ignorando al alma hasta que un día aparece una enfermedad mucho más grave y lo primero que hace uno es sentir temor ante la posibilidad ahora "muy tangible" de que su vida vaya a terminar, entonces uno empieza a ver que aún quedaba tanto por hacer y no tarda en llegar la tristeza, todas emociones negativas que contribuyen a empeorar su situación.

Yo creo que la muerte asociada a una enfermedad grave, es una posibilidad sí; pero no de la forma en que uno lo ve en ese momento, lo que realmente se anuncia es la muerte de la persona que fuimos hasta ese momento, de todas las cosas que hicimos mal hasta ese momento y lo vemos tan claro que es innegable aceptar que veníamos desaprovechando una vida muy rica de bendiciones. No hay razón para temer, no hay razón para pensar que ya no tenemos tiempo porque aún en medio de ese escenario que parece orillarnos al límite de nuestra fortaleza, aún en ese momento, se nos esta presentando una persona nueva, una a la que muy posiblemente conocimos cuando eramos niños y aunque parezca algo muy difícil hay que darle la bienvenida, abrazar a esa persona "extraña" que fuimos nosotros mismos un día.

Las enfermedades solo llegan para recordarnos que necesitamos cambiar muchas cosas en nuestra forma de vivir, para recordar que la primera persona más importante de nuestra vida somos nosotros mismos, que nosotros debimos ser los primeros a los que debíamos querer y consentir; simplemente debimos ser NUESTRO PRIMER AMOR.

En conclusión quiero que empieces a recuperar todo aquello que perdiste, empieza a sumar emociones, recuerdos felices, alegrías, sueños, afectos, llena tus días de todo lo bueno, empieza a ver las enormes bendiciones con las cuales cuentas!!!!. Y ya para terminar te digo una sola cosa: 

Si aceptamos de mal agrado que pasan cosas malas en la vida, ¿por qué no CREEMOS que también pasan cosas buenas?

Tú mismo podrías ser algo bueno para alguien, empezando por tí; ¿qué harás con el resto de tu tiempo?.





domingo, 7 de octubre de 2018

DESPIERTA

Escribo mientras las preciosas notas de una melodía de Fréderic Chopin me acompañan, mi alma se emociona con cada nota y pienso que cada uno de nosotros tiene ese don, ese talento, esa cualidad, esa virtud particular con la cual la vida se hace más bella y el mundo se convierte en un mejor lugar.... son tantas las almas virtuosas que se han extraviado en un mundo banal y material.

Me pregunto ¿por qué extraviamos el camino?, creo que porque la vida no es fácil, porque ya nadie recorre el camino antes que nosotros. Desde hace algún tiempo que estoy trabajando con un grupo de jóvenes y aunque el proyecto me emocionó mucho al principio, cada semana se me va haciendo mucho más difícil, ¿por qué?, porque a mis años mi mirada de la vida es muy distinta a la que tenía a mis 17, porque comprendo lo que pasa por la mente de esos jóvenes, y les entiendo porque son las mismas cosas que yo pensé en su día: Ingresar a la universidad y obtener una profesión que me abra las puertas a un muy peleado mundo laboral en el que consiga un empleo muy lucrativo, destacarme en mi empleo para poder ascender poco a poco hasta llegar al puesto más alto.

Hoy las cosas son muy distintas, hoy veo la vida desde otra perspectiva porque nada de eso consiguió transmitirle vida a mi alma, porque debí empezar por preguntarme ¿qué era lo que realmente me gustaba hacer en la vida? y pelear por ello, construir mi propia hazaña y por que no, contarla a los que vengan detrás, recorrer el camino para poder mostrárselo a quienes venían después..... A mis 17 años solo seguí el consejo de gente que me mostró su propio camino, se les olvido decirme que ese camino nunca les lleno de felicidad, creo que su idea de "bienestar" llegaba hasta ser una pieza más de un sistema.

Trabajar con esos jóvenes y ver la ilusión que les supone imaginar un futuro que escasamente llenará sus almas de alegría, me invita a hacer un trabajo mucho mayor, me invita a decirles que es posible tener lo mejor de los dos mundos, que es posible lanzarse a la gran hazaña de construir sus vidas sin dejar de lado el disfrute que reporta hacer lo que a uno realmente le gusta, aquello para lo cual el tiempo no existe....

Sin embargo me enfrento a las "conductas heredadas", las mismas a las que yo me aferré un día pensando que esa era la forma con la que debía desarrollar mi vida, después de todo, los consejos y las palabras de aliento provenían de personas que me querían, ¿por qué hubiera dudado?.
Un trabajo que al principio me llenó de alegría hoy me invita a trabajar el doble para que este grupo de jóvenes pueda ver al menos otra perspectiva y pueda tomar una decisión mucho más segura y pienso en todas las almas que se perdieron en el camino, en esas almas que hoy miran sus vidas y tienen un cúmulo de frustraciones, aquellas almas que aún hoy se niegan a aceptar que no conocen la vida, que tan solo se dejaron arrastrar por el remolino de una "normalidad" que anestesio sus mentes al punto de la indiferencia.

Debo decir con pesar que ya no veo personas tratando de defender sus propias ideas, ahora me encuentro con personas que repiten discursos encendidos en los que escasamente creen, el cambio climático es un problema de nuestros días y las personas vivimos como si tuviéramos otro planeta al cual mudarnos. Las mentes se han anestesiado porque las almas han dejado de comunicar cosas.

Una frase de Paulo Coelho ha estado rondando mi mente y se las dejo como una invitación para que abracen la vida para la cual nacieron. 

"Un día o día uno. Tú decides"