lunes, 18 de noviembre de 2024

UNA SIMPLE MIRADA INTERIOR

Ayer, durante el servicio dominical, surgió la pregunta: ¿Qué harías si supieras que tienes una semana más de vida? La respuesta apareció en mi mente, casi de inmediato; pasaría mis días en completa paz y tranquilidad, lo cierto es que esta respuesta puso de manifiesto un problema en mí, porque hizo que me diera cuenta que he llenado mis días con tanta ocupación que no reservo para mi, espacios de tiempo para estar en paz y tranquilidad. Entonces me dí a la tarea de preguntar a otras personas, ¿Qué harías si tendrías una semana más de vida?, ¿qué es lo que harías tú?

La mayoría de las respuestas que recibí, pusieron de manifiesto un problema con el cual lidia la mayor parte de las personas: Se vive en un tiempo que no nos pertenece.
Algunos eligen vivir en el pasado y otros en el futuro, llenamos nuestra mente con el agobio de un futuro al cual ni siquiera sabemos si vamos a llegar, por otro lado, pasamos los días añorando un tiempo que ya se fue.

El ejercicio de la pregunta, me gustó tanto que hoy decidí transmitírtelo para que analices qué problema o dificultad te impide vivir tus días en plenitud. 
Siempre te digo que una de las principales actividades a la hora de iniciar el mejoramiento de la gestión emocional, es "limpiar la casa por dentro" y eso implica ver con objetividad qué errores se están cometiendo.

Por alguna razón que desconozco, las personas sufren de "perfeccionismo", me explico: A nadie le gusta reconocer que esta cometiendo un error, pero cuando ese "error" afecta la calidad de vida, hay que tener una entereza enorme para solucionarlo, principalmente porque uno empieza por restarle importancia y luego porque ya forma parte de la rutina de los días y casi que uno incurre en él sin darse cuenta.

Por otro lado, he tenido el infortunio de coincidir con algunos padres, que se niegan a corregir posturas que afectan la relación con sus hijos, la convicción de que "saben" lo que están haciendo les impide escuchar lo que sus propios hijos quieren expresar.
En general, y francamente me gustaría transmitirte esto, cuando hay un problema, especialmente en las relaciones con los demás (hijos, pareja, compañeros de trabajo, amigos, familia) ambas partes están cometiendo un error, y esa claridad acerca a la solución y por ende al bienestar de la relación.

Procura hacer un análisis permanente de cómo estás llevando las cosas en tu vida, pero hazlo sabiendo que no somos personas perfectas, que cometemos errores y felizmente lo hacemos!! porque de otra manera no aprenderíamos nada.

Estamos demasiado acostumbrados a buscar fuera de nosotros, incluso nuestra felicidad!! cuando en realidad una simple mirada interior, te mostrará la realidad.





lunes, 11 de noviembre de 2024

NO TE RINDAS

Con base en las experiencias de muchas personas que conocí a lo largo de mi vida y mi propia experiencia, me animo a decir que no hay sueños rotos, no hay sueños perdidos, no; lo que si hay son errores, que si no se solucionan a tiempo nos pasan la factura del tiempo perdido y ahí sí, se nos pierde la vida.

Puede que te parezcan duras las palabras que acabas de leer, pero no están lejos de la realidad. Tú puedes tener el sueño de encontrar una persona con la cual puedas formar una familia, pero si para eso debes forzar las cosas, estás cometiendo un error!! Quizá te preguntes, ¿cómo es posible que se pueda forzar algo así? Bueno, déjame decirte que es más común de lo que crees, quizá por eso pase tan inadvertidamente.

Solo puedo decirte que si para conseguir el sueño que quieres tienes que fingir ser alguien que no eres, tienes que aceptar cosas y formas de ser de la otra persona que te desagradan, si tienes que convencer de que eres la persona correcta o debes convencerte de que con el tiempo las cosas van a cambiar, que una vez que estén casados todo va a mejorar, estás forzando una situación que con el tiempo, solo va a empeorar.

Tampoco la búsqueda incesante de un trabajo queda fuera de ello, porque si por desesperación; y mira que la desesperación, en ningún caso, es una buena consejera; tienes que aceptar un trabajo para el cual no estás calificado, ya dejemos de lado la felicidad, creo que casi nadie se pone a pensar en ello a la hora de invertir  tiempo de su vida haciendo algo que escasamente disfruta, tarde o temprano terminarás haciendo un mal trabajo, ¿cuál crees que será el resultado de eso?

Sabes, la vida es una escuela, uno comete errores, porque los errores enseñan, es la peor forma de aprender, pero es el único resultado que obtendrás de ellos, no se puede seguir tratando de enmendar un error, porque solo cometerás más equivocaciones, no se puede seguir por un camino equivocado.

Darse cuenta a tiempo , corregir lo que se hizo mal y seguir el camino, es lo más justo de hacer, por tí y por los demás; a veces arrastramos a las personas que más queremos con nuestras acciones o nuestra falta de objetividad, no son los sueños los que se pierden eres tú y el tiempo de tu vida el que se pierde por no desistir. 
Puede que la persona que pensaste que sería el compañero para toda tu vida, no lo era; ¿tienes la seguridad de que más adelante no conocerás a la persona indicada? utiliza la experiencia que adquiriste y haz una buena lectura de las cosas que hiciste mal, no estarás como al principio, porque ya tendrás un buen cúmulo de experiencias que te harán tomar un nuevo rumbo.
No es obligándote a seguir con un trabajo para el que tus habilidades no aplican, que conseguirás la vida que has trazado para tí, porque innegablemente estás forzando un escenario que jamás imaginaste.

Indudablemente habrán sueños que dejarás en el camino porque ya no corresponden a la persona que eres hoy, pero habrán otros a los que voluntariamente estarás dejando atrás por insistir en un camino cerrado.

He insistido en más de una ocasión, sobre la importancia de revisar la vida  con objetividad y corregir lo que haya que corregir, aún estas a tiempo de alcanzar la vida que soñaste para ti. No te rindas!!



domingo, 3 de noviembre de 2024

UN PERFECTO EQUILIBRIO

No tengo la seguridad de que estemos absolutamente conscientes sobre la importancia que tiene la parte espiritual de nuestro ser. 
Si, a veces el marasmo de la vida nos arrastra con él y perdemos de vista las cosas que de verdad importan, tendemos a minimizar su importancia, romantizamos la idea del alma, o de nuestro ser interior.

Bueno, quienes me conocen saben, que en muy contadas ocasiones he romantizado algo, más aún si tiene tanta importancia como la vida que se desarrolla en nuestro interior. Trabajo permanentemente con procesos creativos, escenarios que incluye el permanente análisis de ese "mundo interior" al que pocas veces consideramos importante.

Con los años, he visto demasiadas veces, la forma en la que las personas se deterioran no solo interiormente, también físicamente, porque no han sabido dedicar tiempo e interés a todo aquello que realmente les hace sentir "vivos".

Acabamos de celebrar la fiesta de Todos Santos y el día de difuntos. La muerte es sin lugar a dudar, el golpe más fuerte que puede recibir el alma, se requiere de mucha fortaleza espiritual para seguir, pero seguir en completa plenitud, reconciliándote con la vida y transformando ese dolor, en una verdadera alegoría a la vida.

La pérdida de un ser querido, no es la única forma de atravesar el duelo, hay tantas pérdidas por las que atravesamos en nuestra existencia, también los sueños que dejamos ir, son pérdidas que se sienten como enormes derrotas que mellan el alma.

Uno debe llevar adelante un verdadero proceso de sanación espiritual, si quiere seguir su camino  pero sobretodo con la mirada fija en un horizonte lleno de posibilidades y no me refiero a las que medimos con facilidad (trabajo, dinero, etc) me refiero a las posibilidades de realización, de felicidad, de esperanza, de paz, de alegría.

Caminar con el espíritu enfermo o deteriorado, es como conducir un auto con poca gasolina, éste tarde o temprano se detendrá y no habrá forma en que puedas hacer que siga el trayecto. 
La mayor parte de la vida que llevas adelante todos los días, se desarrolla en ese mundo interior al que se presta atención en muy contadas ocasiones y sin embargo procuramos seguir a pesar de no SENTIRNOS bien, de no sentirnos felices. ¿Por cuánto tiempo más podremos seguir?

Hace poco, leí un pequeño fragmento en el que con humor, se encaraba el hecho de que la mayor parte del tiempo, las personas que sacan vacaciones y eligen un destino para conocer, se pasan el tiempo cansados porque deben aprovechar el tiempo al máximo para conocer la mayor cantidad de lugares. ¿En qué momento descansa el alma?

¿Comprendes lo que trato de decirte?, la idea que tengo de vacaciones, es reservar un tiempo, para alojarme en algún lugar del mundo, en el que pueda permitirme estar en paz, lejos de las preocupaciones y las tareas que forman parte de mi rutina diaria. Un lugar en el mundo donde pueda tener tiempo para pensar en todo aquello en lo que a propia voluntad elijo de no pensar porque no tengo tiempo y si tengo un poco de suerte, mi alma hallará tanta paz, que me dedicaré a hacer lo que realmente me gusta, aquello que disfruto tanto que el tiempo desaparece cuando me empleo en ello.

Puede que te identifiques con mi idea o no; lo cierto es que elijas la forma que elijas, hazlo sabiendo que el tiempo que dediques a sanar viejas heridas, a pensar en la forma en que estas llevando adelante tus relaciones personales, a reencontrarte con la persona que eres y a preguntarte si los sueños pendientes, todavía forman parte de la persona que eres hoy. Es importante!!

La idea es vivir en un perfecto equilibrio: Tu vida interior y exterior deben trabajar juntas, de manera tal que ambas te acerquen a tu felicidad, no se trata de que descuides una para dar prioridad a la otra, es posible ser feliz, de una forma completa y plena, pero para eso necesitas revisar tus prioridades y preguntarte de forma permanente, su todo aquello que estás haciendo te acerca a tu bienestar y por ende, a tu felicidad.

Recuerda que nadie más que tú, eres responsable de tu felicidad, de tu bienestar y de tu paz, empleate en ello, nadie más lo hará por tí.






domingo, 27 de octubre de 2024

EL TIEMPO DE CENIZA HA TERMINADO

Con las  disculpas  del caso por no haber podido escribir la semana anterior, hoy quiero compartir contigo  algo que ocupó  mi mente este último tiempo.

Como  sabes, se aproxima la celebración de todos  santos y  el día de  difuntos, ahora bien, ¿qué me pasa con esta fecha? antes que nada,  siempre fui  de cumplir con las costumbres y armar la mesa de difuntos, luego con el fallecimiento de  mi  papá, esta costumbre adquirió  un mayor significado, el primer  año,  como debes imaginar, preparé la mesa con un cúmulo de sentimientos encontrados. Oscile entre  la tristeza y  la rabia (en momentos así, suelen manifestarse las emociones con las que  más hemos  peleado en  nuestra  vida. Como un buen ejercicio, sería bueno que identifiques  cuáles son  las tuyas), en fin, con los años  de  la  tristeza uno pasa a  la aceptación, pero  este año en  particular  me encuentro  trabajando con una frase que  no  deja de pasear por mi  mente:
Somos energía

Con esto en mente, estoy redireccionando mi atención, de forma permanente a todo aquello  que genera bienestar en  mi interior y como respuesta empiezo a sentir  gratitud por cada nuevo día y por  todo lo bueno que pasará ese  día. 
Este año por  tanto, he decidido  darle un nuevo significado a la celebración del día de difuntos,  pondré la mesa como dicta la costumbre,  pero esta vez le  daré un nuevo significado, esta vez será una celebración a  la vida, más que  a la  muerte como  estamos acostumbrados. No es que ya no crea que  vienen los difuntos a visitarnos, como dicta la costumbre, es más bien  que ahora su recuerdo ya  no será un recuerdo muerto, compartiré con ellos todo aquello  que habría compartido si aún estuvieran conmigo!!

Tú sabes que lo  que manda  la costumbre, es colocar en  la  mesa todo aquello que en vida les gustaba, pues bien, el tiempo de ceniza ha terminado, es tiempo de rodearnos  de luz, de incluir sus recuerdos a  la vida, a  nuestras vidas, y llevarlos en el corazón, pero no como  una ausencia dolorosa, más  bien con la luz que ilumina  nuestras sonrisas con  su  solo recuerdo. 

Esta vez, recibiré a mis difuntos, con una hermosa alegoría a la vida, porque Dios es  un Dios de vida y   despediré sí, pero será a todos esos "fantasmas"  con los que he  cargado por  más tiempo  del que  hubiera querido: Amistades que ya no forman  parte de mi  vida pero cuya ausencia ha seguido doliendo, recuerdos dolorosos  que  paso en mi mente  una y  otra vez, como si fuera  una película,  sueños incumplidos que ya no forman parte de la persona que soy ahora.

Despediré todo aquello  que ya no forma parte de mi vida,  he  decidido que  haré de esto una  nueva costumbre, porque somos energía y  bien vale ponerla  en movimiento!!

Mira, sea cual sea  la forma en que decidas celebrar este tiempo, solo piensa que sería bueno empezar a practicar más  la alegría  y  hacerla parte de  nuestros días. EL TIEMPO DE CENIZA HA TERMINADO.




domingo, 13 de octubre de 2024

¿QUIEN SE VA A OCUPAR DE TU FELIDAD?

Me gusta pensar en mi camino, como  la sucesión de historias que ya se han  escrito,,  algunas ya  concluidas  y  otras aún en  curso. Me fascina la magia con la cual cada  una se enlaza  con otras, por un largo o corto tiempo.  Aunque a este respecto, déjame  decirte que no hay nada que separe más  dos  caminos,  que el tiempo que dejamos pasar tras una separación.
Dicen que cuando has tenido  una discusión con  alguien, debes esperar que pase  un  tiempo. Particularmente,, creo que  el tiempo: ni cura las heridas,  ni reduce el rencor. LA VIDA ES ACCION!! 
Recuérdalo la próxima vez que  te sientas tentado a dejar pasar el tiempo, porque el tiempo sin  acción es solo  tiempo perdido.

Soy de las primeras personas en creer que no hay magia  más grande que el  amor. Acorta  distancias y tiene la absoluta capacidad de cerrar las heridas más profundas, pero a menudo emprendemos rumbo, esperando encontrar ese "gran  amor" en algún momento de nuestro camino.
Esto no es del todo  cierto, uno espera el amor,  no sale en su busca y esta  sencilla verdad descansa en otra no menos  importante  pero un poco más difícil de entender: Primero debes buscar tu  amor propio. ¿Qué tiene que  ver  con las largas o cortas historias que  forman parte  de la historia de tu vida?  Todo, absolutamente  todo.

A lo largo de tu camino, eres hijo, eres hermano, eres esposo, eres padre: ERES.
La clave de tu  propia felicidad esta en esa palabra, "eres",  porque  a veces olvidamos  que en todas esas pequeñas o  grandes  historias, somo siempre nosotros los autores de la  historia  de  nuestras vidas, parece  algo fácil de entender,  pero a veces (casi siempre) es tan grande el amor  que les tenemos a los demás (a esas historias que  enlazan con la nuestra) que olvidamos que nosotros somos nuestra mayor  prioridad.

Hace  falta recordar esto  más a menudo,  porque vivir en función de la existencia de alguien más  (de sus necesidades, de sus  problemas, de sus batallas) te aleja de tu propia vida, llegas a  un punto en que eres la  persona más segura para los que amas e irónicamente eres la persona más ausente para ti.

¿Quién esta viviendo tu vida mientras vives la de los demás? créeme que sucede más  frecuentemente de lo  que imaginas, un  buen día, cuando el cansancio se  ha hecho  presente, te das cuenta que ya no tienes tantos años  por  delante como creías y  tampoco tienes las fuerzas que  necesitas para empezar a escribir tu  propia historia....

Encara tus  días con amor, preocúpate  por los que amas, pero no cometas el error de ponerte en segundo lugar, porque entonces estás fallándote a tí  mismas. Las historias de los demás, no son la tuya, son apenas pequeñas o  grandes historias  que deberían girar en torno a la  tuya.
¿Quién se va a ocupar de tu  felicidad sino tú mismo?




domingo, 6 de octubre de 2024

ABRAZA TU CAMINO

Nuestra vida en la actualidad de nuestros días, es el resultado de las decisiones que hemos tomado, cada decisión, nos ha traído hasta  aquí. ¿Qué opinas de esto?, te lo pregunto, porque  sucede mucho más a menudo de lo que nos gustaría  reconocer: Buscamos culpables fuera de nosotros, preferimos de propia voluntad,  creer que hay  "alguien" ahí afuera, que  es  el culpable  de que no estemos como nos gustaría. 

Si fuimos despedidos  de algún trabajo, el culpable es el jefe, algún compañero de trabajo, etc.,  si  nuestra pareja  se alejó de nosotros, fue  por todo aquello  que  no fue capaz de cambiar... podríamos  mencionar muchos más aspectos de nuestra vida que no están o no marchan como imaginamos,  pero sabes, esta vida es tuya y no hay nada que pueda pasar  fuera de  nosotros, que tenga  la capacidad de modificar en modo alguno, el proyecto que trazamos para nosotros, salvo que lo hayamos permitido. No  hay culpables más  que  nosotros  mismos.

Puede que a estas alturas, te sea difícil comprender lo  que te digo  y es que es muy difícil  aceptar, que esta vida, que apenas reconoces, la hayas construido tú, pero es cierto. 
Somos energía y es esa misma  energía la que muchas  veces se traduce en obstáculos que "encontramos" en el camino, sencillamente porque nuestra alma conoce  nuestro camino, y  hay un  conocimiento interior que guía nuestros pasos hacia el camino  que  debemos tomar.

Recuerda que de  todo lo que experimentamos: aprendemos. Los aciertos y  los errores forman  parte de nuestro  camino,  todo lo que  dejamos atrás,  lo hicimos  por elección!! Personas y  lugares que  no  contribuían al destino al que  nos dirigimos.

Es parte de nuestra madurez espiritual reconocer que  hay  mucho  de  lo  que hoy tenemos o  carecemos que fue propiciado por nosotros mismos. Porque tales elecciones nos conducen al camino que debemos seguir.  A  la luz del conocimiento del  alma, no existen  los caminos  "cerrados", son  solo experiencias que se  traducen en  lecciones que luego se traducen en  la vida que vamos construyendo día a día.

Abraza tu camino, recórrelo  sin miedo, sabiendo que nada  ni  nadie tiene la capacidad de alterar tus  pasos,  salvo tú  mismo.







domingo, 29 de septiembre de 2024

HACIA NUEVOS RUMBOS

Particularmente, no soy de las personas que reciba  a bien cuando alguien se va, cuando yo debo dejar  un lugar o en  fin, cuando algo termina. 
Sin embargo, recientemente escuché una reflexión que me dejó  en  qué pensar (como bien  sabes, le  doy  la bienvenida a todo lo que me invita a pensar y reflexionar). 

La misma  se enfocaba en el hecho  de dejar ir personas , momentos o  lugares, porque todo ello  pertenece a  una persona  que ya no eres y es por tanto la vida diciéndote que es tu tiempo de seguir adelante y esto precisamente es lo que estuvo paseando por mi mente varios días.

Jamás había pensado en el otro lado de  las despedidas:

LOS QUE PASAMOS SOMOS NOSOTROS!!!

Como  bien  sabes, nosotros no somos los mismos de años atrás, por lo  tanto no son los lugares, no  son los eventos, no son  las personas  que se van,  somos nosotros  quienes nos despedidos,  dejamos atrás un  tiempo al cual ya no pertenecemos, como cuando siendo niños debemos desechar nuestro viejo par de zapatos porque ya no nos queda bien y  es en este punto que deseo concentrarme.

El tema  de  tener  que despedir o  dejar ir algo que es importante,  es  que casi siempre lo hacemos con la tristeza como consecuencia lógica del cariño que  depositamos en ellos, pero casi nunca reparamos en  que ya no  nos encontrábamos en condiciones óptimas, porque  todo ello  formaba  parte de  la vida de una persona que  ya no somos.

Abraza  el tiempo  nuevo que se abre ante  tí y  despide lo  pasado con gratitud, por lo  vivido,  las  enseñanzas  que te llevaron a ser quien eres hoy y  los momentos felices que  abrigarán tu corazón en tiempos de dificultad.

Cuando  sientas que  la tristeza de su recuerdo quiera instalarse en tu corazón, despídela en  paz, porque no hay sitio para ella. 
Sigue adelante, con la convicción, de que  a donde quiera que vayas, será solo otra parada más, hacia tu  destino final.