domingo, 10 de julio de 2011

EL VALOR DE LA AMISTAD

Hola Amigos!!!:
Inicia una nueva semana; ¿cómo estan?; ¿qué eventos inolvidables han vivido en los días que han pasado?; recuerden que del pasado hay que recordar lo mejor y de los malos momentos, hay que aprender.
Agradezco infinitamente a quienes van dejando sus comentarios en las humildes reflexiones que comparto sobre diferentes temas en los que pienso; del mismo modo, les agradezco el hacerse seguidores de este sitio, para mi, es muy grato recibirlos, saber que de esta forma, se va ampliando esta pequeña comunidad a los que llamo mis amigos.

Esta semana, quiero hacer referencia a la amistad; que palabra tan bonita y muchas veces utilizada en nuestro cotidiano vivir; la definición de la misma nos dice que la amistad es: "Afecto personal, puro y desinteresado, ordinariamente recíproco, que nace y se fortalece con el trato". (Diccionario Enciclopédico Universal).
¿Qué les parece? ; es realmente increíble el magnífico significado de la palabra amistad y es al mismo tiempo sorprendente el modo en el que utilizamos esta palabra con absoluta ligereza.

Todos conocemos que las personas, deberían estar familiarizadas con valores que enriquecen al ser humano; como ser; La sinceridad, la honestidad, la sencillez, etc. Pues bien son llamados valores, porque precisamente hacen que las personas que los adquieren tengan un tesoro, una cualidad que hará de ellas personas valiosas por su maravillosa forma de conducirse en la vida. La amistad, no podía quedar fuera de los valores que uno debe buscar, pues el cultivarla, requiere de cada uno de nosotros, un gran esfuerzo.

Se dice que quien ha encontrado a un amigo, ha descubierto para sí, un gran tesoro, pues ha encontrado una persona que permanecerá en tu vida a pesar del tiempo y la distancia que pueda existir; será capaz de hacerte notar cuando estas equivocado y compartirá contigo momentos alegres y tristes; y cuanto mas no permanecerá a tu lado, en momentos difíciles, los cuales son precisamente aquellos en los que nadie quiere estar; es irónca la forma en la que en momentos de bienestar y bonanza, estamos rodeados de personas, pero debemos saber diferenciar entre las compañías de ocasión y un amigo verdadero.

La amistad, ha ido perdiendo su valor con el paso de los años, hoy nos resulta común llamar a los compañeros de estudio, de trabajo, etc. "amigos" y quizás sea porque no queremos reconocer que probablemente no tenemos amigos o que son muy pocos.
Por otra parte, es fácil comenzar a ver los errores que cometen los demás, pero ciertamente deberíamos empezar a ver nuestro propio comportamiento. Preguntarnos, que capacidad de brindar amistad tenemos;  si somos capaces de estimar a otra persona desinteresadamente y de valorarla tal cual es, con el mucho o poco dinero que tenga, con la apariencia que pueda tener; con la capacidad intelectual que tenga, etc.

Es necesario, que tengamos en cuenta todo esto, porque esperar encontrar cosas buenas en nuestra vida, dependerá en gran medida de la capacidad que tenemos nosotros de dar cosas buenas a los demás. Recuerden que todo lo que encontramos en nuestro camino, es una consecuencia de la forma en la que nos hemos conducido por el. El cambio debe empezar siempre primero de uno, para poder ver la diferencia en el resto.

¿Cuál de nosotros puede decir que no ha tenido jamás un solo amigo?; es muy probable que en los momentos de dificultad, cuando más tristes y solos estamos, vengan a nuestra mente, aquellas personas que compartieron un tiempo con nosotros, a las que habremos fallado o nos habrán fallado en determinada ocasión, aquellas con las que pasabamos momentos agradables y que en un momento de nuestras vidas llegaron a ser muy importantes, pero por una u otra razón se alejaron de nosotros, personas a las que llamabamos amigos, y que a la primera discusión se fueron. 

Desde la soledad y la tristeza, nos cuesta trabajo poder ver claramente; solo vemos las malas experiencias de la vida, pero si dejamos que esos momentos no turben lo que nos dice nuestro corazón, podremos ver que sí había alguien que se precia de ser nuestro amigo y tiene todo el derecho de hacerlo. Nos daremos cuenta de que sí había alguien que estaba junto a nosotros, incluso compartiendo la tristeza que tenemos, y que esta diciendonos que todo va estar mejor mañana, que no perdamos las ganas de vivir y que esperemos a conocer a las personas adecuadas, a las que dejarán huellas profundas en nuestro corazón por la sinceridad de sus sentimientos, por los gratos momentos que estan por vivirse. ¿Estas preguntándote quién es?; la respuesta puede o no sorprenderte, pero al final es solo una: DIOS.

Si, es muy probable, que todavía no te hayas  dado cuenta de que sí tienes un amigo insuperable, es muy probable, que todavía no te hayas dado cuenta de las muchas ocasiones en las que te ha tendido la mano, en las que ha tratado de animarte, en las que intentó comunicarse contigo; y tú no le has escuchado pero como es tu amigo incondicional, a pesar de no haberle incluido en tu vida, él no se ha alejado de ti. 

Puedes ver esto, por las personas que te han dado una palabra de aliento, cuando lo precisaste; por los mensajes de ánimo, de esperanza y optimismo, que tal vez recibiste en la cotidianidad de tu vida (libros, canciones, películas, etc.) y que llegaron a tu mente de forma inesperada; por aquella muestra de cariño que sentiste, cuando tu corazón se sentía frágil y que llegó a tí como un rayo de sol en la calle, el precioso canto de un pajarillo, la brisa que sentiste en tu rostro e inundo de ansias de libertad tu corazón; la risa sincera de un niño, que te invitó a compartir su alegría y te sorprendiste riendo sin saber porque. 
Dios se muestra asi, para quienes todavían no lo conocen, recuerda esto la siguiente vez que sientas alegría, confianza, consuelo, esperanza, y no sepas porque.

Para los que sabemos que Dios es nuestro amigo, sabemos que podemos hablar con el, en cualquier situación, que a veces estamos muy tristes y nos parecería que no hay nadie que pueda entender lo que estamos pasando y que las palabras de las personas que nos rodean, aunque estan plagadas de buena intención, no consiguen levantarnos el ánimo, entonces la sola contemplación a nuestro padre, nuestro amigo, hace que podamos desahogarnos, que depositemos en él, todo nuestro pesar, y sabemos en el corazón, que él es el amigo que no falla y que desde el primer momento que nos vió tristes esta tratando de ayudarnos a estar mejor.

Dios, es el amigo, para el que la definición, de la palabra amistad, si se aplica en toda su dimensión, y al que tambien podemos pedirle que en este mundo, nos ayude a encontrar a las personas con quienes viviremos gratos momentos, de quienes recibiremos palabras que nos alienten, que nos estimen por lo que somos y no por lo que tenemos y a quienes podremos tambien darles un poquito de ese inmenso amor que recibimos de nuestro padre.
Dios es el amigo, que sabe que estas atravesando o has travesado momentos de aflicción y que sanará las haeridas de tu corazón, para permanecer abierto a nuevas y maravillosas experiencias. Dios es quien nos brinda y nos hace capaces de compartir, EL VALOR DE LA AMISTAD.

Que tengas una maravillosa semana, recuerda que estas invitado a hacerte seguidor de este sitio, gracias por visitarme.  Hasta la próxima.

Fotografía "White party" (Ing. Rosario Dominguez)

2 comentarios:

  1. Que bueno Yanka, la reflexión que pusiste está genial, recordar que tenemos un amigo incondicional y a prueba de todo es una aliento para seguir, porque cada día nos vemos mas juzgados, marginados y rechazados de una sociedad donde gente como nosotros casi no tiene cabida, y ahí bueno está Dios que nos ama tal cual somos...además el único valor que le importa al mundo es el valor del dinero ¿no?...si quiera para los pocos que consideramos a Dios nuestro verdadero amigo en común, está la posibilidad de ser también un tesoro para alguien ;)

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