domingo, 28 de octubre de 2012

ANTORCHAS DE LUZ

Amigos, bienvenidos!!!:
¿Cómo están?, ¿cómo van pasando esos días?. Hay tantas cosas por las cuales debemos estar realmente agradecidos a Dios; nuestra salud, nuestro trabajo, nuestra familia y tantas otras cosas con las cuales contamos en nuestra vida. Es realmente muy importante que seamos conscientes de que tenemos muchísimas  cosas que agradecer, que la rutina y la seguridad de verlas a diario no nos quiten la felicidad de contar con ellas en nuestra vida.

Esta semana, tuve la oportunidad de ayudar a una paloma que traviesamente había ingresado a mi sala, la pobre se llevó un susto cuando me vio, lo que le llevó a volar alocadamente por todo lado, por mi parte yo trataba de llevarla, orientarla hacia la ventana, entonces después de mucho intentar finalmente ella pudo ver el camino que le señalaba; emprendió su vuelo libre y maravilloso hacia afuera.

Este pequeño evento, además de llenar de alegría mi corazón ya que no hay nada más hermoso que ver el vuelo libre y tranquilo de los pájaros, me hizo reflexionar en el hecho de que todos a nuestro modo y desde lo pequeño que podemos hacer, también somos como antorchas encendidas señalando el camino para aquellos que vienen caminando junto a nosotros, lo seremos mucho más para aquellos que vienen tratando de seguir su propio camino.

Aquella paloma se encontraba encerrada, y trataba por todos los medios encontrar nuevamente su libertad, surcar aquel cielo maravilloso en completa libertad, y ahí estaba yo, tratando de hacerle entender que la salida, estaba más cerca de lo que ella podía imaginarse. ¿Cuántas veces no estuvimos así en muchas ocasiones de adversidad en nuestra vida?; ¿tuvimos a alguien indicándonos el camino entonces?, ¿le escuchamos tranquilamente? o reaccionamos bruscamente y tratamos de seguir solos.....

A lo largo de nuestro camino, nos topamos con muchas personas que trataron de ayudarnos, desde su propia experiencia, pero sencillamente no tomamos sus consejos o su ayuda. También puede ocurrir que seamos nosotros quienes tengamos una visión más clara con relación a un determinado problema y nos encontremos con una pared, que parece no escucharnos.

Un consejo, nunca esta demás, a veces nos señala un camino, que otra persona ya ha recorrido con anterioridad, la posibilidad de tomarlo o no, siempre estará en nuestras manos, también nosotros vamos recorriendo nuestro propio camino; pero podemos al menos detenernos un tiempo para pensar y decidir si es lo que debemos hacer o podemos actuar de acuerdo a lo que nosotros pensamos que será lo correcto.

Sea que estemos en el lugar de la persona que recibe un consejo o la que lo da; hay algo que no cambiará jamás, y es el hecho de que todos a nuestro modo estamos recorriendo este camino llamado vida; es nuestra tarea hacerlo de la mejor manera posible, no tanto por el bien de los demás como por el nuestro; aunque a la larga ver las cosas con claridad gracias a una experiencia previa, nos llevara a querer brindar ayuda aún cuando no sea recibida.

Una de las cosa que realmente traba nuestro camino, es no saber lo que se quiere hacer realmente; esta pequeña desorientación nos lleva a emprender caminos equivocados una y otra vez; lamentablemente nos lleva también a lastimar a las personas que permanecen a nuestro lado y de quienes recibimos tanto cariño....

Para poder ser una antorcha de luz para alguien, es preciso que primero seamos capaces de iluminar nuestro propio camino.

Es preciso que primero, nos tomemos un tiempo para poder descubrir que es aquello que realmente queremos hacer; no importa si han pasado años de nuestra vida, durante los cuales nos dedicamos a una actividad que realmente nunca disfrutamos; el tiempo es algo que le pertenece solo a Dios, pero nosotros somos los responsables de hacer que ese tiempo no pase en vano.

Sea cual sea, la tarea que uno escoja, después de pensar profundamente sobre lo que queremos en esta vida; implica que creamos que somos capaces de llevarla adelante, por encima de todos los obstáculos que imaginemos que existen o que vayamos descubriendo en el camino. La seguridad de seguir adelante surgirá solo por medio de la certeza que tenemos al saber que estamos realizando la tarea que siempre quisimos y con la cual nos sentimos bien.

Cuando nuestro camino sea tan claro, que podamos verlo desde la cima con alegría; entonces podremos también llevar luz a quienes se encuentran perdidos....

Que tangas una feliz semana. Hasta la próxima.

Fotografía "Eight" (Rosier Db)

1 comentario:

  1. Yanka...en esta ocasión, tendria que decir,que creo haber estado en ambos lados muchas oportunidades. De las que dió el consejo y no lo tomaron y de las que recibió uno y no lo quizo escuchar ;) así que por mi experincia creo que es muy humano, pero aún así debo reconocer, que talvez no tomemos la ayuda en el momento de buena forma, pero al menos quedémonos con la buena intencion de la otra persona y tratemos en lo posible de pensar en ello y como me sucedió sientos de miles de veces, a la larga te das cuenta que te dijeron algo muy bueno y muy útil, así que "Saber escuhar y pensar en ello es una bendición".
    Que tengas una linda semana.

    ResponderEliminar

Gracias por tomar un tiempo para compartir. Vuelve cuando quieras.