domingo, 6 de julio de 2014

EL HOMBRE SE HA ALEJADO DE DIOS....

Amigos, ¿cómo les va?:
Me gusta pensar que cada uno de los instantes vividos tienen una sola razón de ser: Vamos camino a la realización de nuestros sueños!!!. Por esta razón celebro que iniciemos otro mes del año, como lo es este precioso Julio, que de entrada inicia con las mejores posibilidades que podemos tener, se presenta ante nosotros con cada uno de sus días en blanco, listos para ser llenados de recuerdos gratos o de importantes lecciones.... 
De una u otra manera, estamos vivos, ¿qué mas podemos pedir?, nada mas que enfrentar esta maravillosa existencia con una actitud optimista y perseverante, pero sobre todo atentos a todo lo que puede traernos este nuevo mes.
Una de las maravillosas cosas que trae este mes, es la final del mundial!!!, como ustedes bien saben, el football es mi deporte favorito, ya espero con ansias que se juegue la final y para todos aquellos que no gustan tanto de ver los partidos de football, pues disfruten de reunirse con amigos y familiares, igual todo se convierte en un tiempo de celebración cuando uno esta junto a sus seres queridos.

Hace tan solo unos días atrás, encontré esta historia en la que aparentemente se relatan los dichos de Albert Einsten sobre Dios, historia que hoy comparto con ustedes y que por lo menos a mí me dejo mucho en que pensar:

UN JOVEN LLAMADO ALBERT EINSTEIN
Un profesor universitario retó a sus alumnos con esta pregunta.
-¿Dios creó todo lo que existe?

Un estudiante contestó valiente:
-Sí, lo hizo.
-¿Dios creó todo?
-Sí señor, -respondió el joven.

El profesor contestó,
-Si Dios creó todo, entonces Dios hizo el mal, pues el mal existe y bajo el precepto de que nuestras obras son un reflejo de nosotros mismos, entonces Dios es malo. 

El estudiante se quedó callado ante tal respuesta y el profesor, feliz, se jactaba de haber probado una vez más que la fe cristiana era un mito. Otro estudiante levantó su mano y dijo:
-¿Puedo hacer una pregunta, profesor?.
-Por supuesto, -respondió el profesor. 

El joven se puso de pie y preguntó:
-¿Profesor, existe el frío?,
-¿Qué pregunta es esa? Por supuesto que existe, ¿acaso usted no ha tenido frío?. 

El muchacho respondió:
-De hecho, señor, el frío no existe.  Según las leyes de la Física, lo que consideramos frío, en realidad es ausencia de calor. “Todo cuerpo u objeto es susceptible de estudio cuando tiene o transmite energía, el calor es lo que hace que dicho cuerpo tenga o transmita energía. El cero absoluto es la ausencia total y absoluta de calor, todos los cuerpos se vuelven inertes, incapaces de reaccionar, pero el frío no existe. Hemos creado ese término para describir cómo nos sentimos si no tenemos calor”. Y, ¿existe la oscuridad? -continuó el estudiante.

El profesor respondió:
-Por supuesto. 

El estudiante contestó:
-Nuevamente se equivoca, señor, la oscuridad tampoco existe. La oscuridad es en realidad ausencia de luz. La luz se puede estudiar, la oscuridad no, incluso existe el prisma de Nichols para descomponer la luz blanca en los varios colores en que está compuesta, con sus diferentes longitudes de onda. La oscuridad no. Un simple rayo de luz rasga las tinieblas e ilumina la superficie donde termina el haz de luz. ¿Cómo puede saber cuan oscuro está un espacio determinado? Con base en la cantidad de luz presente en ese espacio, ¿no es así? Oscuridad es un término que el hombre ha desarrollado para describir lo que sucede cuando no hay luz presente.

Finalmente, el joven preguntó al profesor:
-Señor, ¿existe el mal?.

El profesor respondió:
-Por supuesto que existe, como lo mencioné al principio, vemos violaciones, crímenes y violencia en todo el mundo, esas cosas son del mal. 

A lo que el estudiante respondió:
-El mal no existe, señor, o al menos no existe por si mismo. El mal es simplemente la ausencia de Dios, es, al igual que los casos anteriores un término que el hombre ha creado para describir esa ausencia de Dios. Dios no creó el mal. No es como la fe o el amor, que existen como existen el calor y la luz. El mal es el resultado de que la humanidad no tenga a Dios presente en sus corazones.  Es como resulta el frío cuando no hay calor, o la oscuridad cuando no hay luz.

Entonces el profesor, después de asentar con la cabeza, se quedó callado. 
El nombre del joven era Albert Einstein.

Una historia que ilustra a la perfección lo que quiero compartir con ustedes. Y es que evidentemente mirando con atención el proceder quienes comparten nuestro mundo, demuestra una innegable ausencia de Dios en el corazón de las personas y esta negación parece manifestarse en primer lugar en las creaciones de Dios que son destruidas o amenazadas por el hombre.
Sufren los animales, sufre la naturaleza en general y por ende sufre el mismo ser humano, esta AUSENCIA DE DIOS en las vidas de quienes se dedican a hacer el mal.

El bien como cualquier otro aspecto de la vida, precisa de las personas para entrar en acción, y por ende el mal también lo precisa. Decimos vivir en libertad cuando la realidad es que el ser humano vive cada día más preso de sus propias inclinaciones.

El maravilloso derecho a la libertad del cual gozamos desde el primer minuto de nuestras vidas, no nos da el derecho de hacer daño a nadie, ni siquiera a nosotros mismos. Resalto lo último, porque la vida nos muestra desafortunadamente que son los actos de la misma humanidad la que va dañando a la humanidad.

¿No es el hombre el que ha deteriorado el medio ambiente?, un medio ambiente en el que él mismo vive, un medio ambiente que hace mucho tiempo que no demuestra la calidad que solía tener por las acciones equívocas de una humanidad a la que le fue puesta en sus manos un planeta lleno de maravillas y al que hoy no le queda ni la humanidad.

Los animales muestran su amor desinteresado e incondicional, pero con tristeza observamos como van incrementando las cifras de perros y gatos abandonados, de la caza y trafico de animales, por mencionar solo algunas de las atrocidades que el ser humano es capaz de cometer.

El corazón de los hombres ha perdido el calor del amor por todo aquello que le rodea, por su propia existencia, ahora solo se complace en las posesiones materiales que es capaz de atesorar, pero resulta que estas posesiones no dan cariño, estas posesiones no consuelan, estas posesiones ni siquiera son capaces de reproducir la belleza que una naturaleza que lucha por permanecer nos muestra a simple vista, estas posesiones no pueden regalarnos una sola sonrisa sincera, no pueden salir llenos de felicidad a recibirnos cuando llegamos a casa, estas posesiones no pueden manifestar la grandeza de su creador porque su creador es un ser corrupto falto de amor, incapaz de ver todo lo bueno que tiene a su alrededor e incapaz de apreciar lo bueno que tuvo un día en su interior.

El ser humano ha desafiado a Dios, tratando de dirigir este mundo lejos de él y lo único que ha encontrado es desolación, es desesperación, es frialdad, es odio, es rencor, es división, es corrupción fruto de una ambición desmedida, es soledad porque el placer no puede ocupar el lugar que debería ocupar el amor,  es el mal en todas sus dimensiones.

El hombre ha negado al punto la existencia de Dios que hoy vive una existencia vacía, en un mundo que empieza a deteriorarse porque esta lejos del amor, de la amistad, de la confianza, de la honestidad, de la corresponsabilidad de este mundo que le fue dado en sus manos, porque simplemente el hombre ya no es capaz de aceptar que no es nada lejos de Dios y que precisa de su ayuda porque su corazón se ha llenado de orgullo, porque se niega a aceptar que en la simplicidad de la vida radica su felicidad y que ésta como todas las cosas que tienen que ver con Dios carecen de un valor monetario pero fueron puestas en nuestras manos como el más grande los tesoros.

Es posible que el mal exista porque el hombre ha dejado de albergar a Dios en su corazón.....

Que esta semana venga llena de inmensas alegrías!!. Hasta la próxima.


1 comentario:

Gracias por tomar un tiempo para compartir. Vuelve cuando quieras.