domingo, 9 de noviembre de 2014

CARTAS A UN CORAZON DESTROZADO....

Hola Amigos, ¿cómo les va?:
¡Qué vida la que tenemos!, que bueno reunirnos una vez más aquí!, qué bueno recorrer este camino!, que bueno desconocer hacia dónde nos conduce!. La mayor parte del disfrute de la vida descansa en el no saber lo que esta por venir, en esa maravillosa sensación mezcla de sorpresa y felicidad cuando algo bueno e inesperado sucede para dar color a nuestros días, para iluminar de pronto y de golpe esos días grises, para regalarle al corazón una canción de amor, de amistad o de gratitud.... una canción de vida!!!.
Así se van pasando nuestros días, el capítulo de este noviembre ya ha escrito sus primeras páginas, y la invitación que les hago es que celebren, celebren por las cosas buenas que han sucedido, suceden y sucederán a lo largo de nuestro camino......

Mientras escucho los maravillosos acordes en piano de esa preciosa melodía "River Flows in you", mi mente viaja a tantos escenarios ya recorridos, a tantos rostros que partieron y hoy no están más, voy leyendo mi poema favorito de Benedetti: "Te espero" y mi alama no puede estar más feliz.... A veces es tan poco lo que se puede hacer por regalarnos unos minutos de paz, de tranquilidad pero sobre todo de la gozosa compañía con nosotros mismos, cuántos momentos ya vividos, cuántas palabras de consuelo o de felicitación recibidas pero sobre todo cuanta compañía recibida.....

Pienso en estas personas que con seguridad no dudaron de compartir muchas horas consigo mismos para que hoy estemos disfrutando de sus creaciones, sean en música, en letras o la forma que sea; ¿qué hubiera pasado si ellos nunca hubieran creado cosas tan preciadas que hoy inundan el corazón de tanta felicidad?...

Hoy, esta semana; quiero hablarles de esos momentos en los que no contamos más que con nosotros mismos, ¿cuántos momentos de angustia o de tristeza?, ¿cuántos momentos de dicha?, ¿cuántos momentos de dudas e incomprensión?. He decidido poner este título al cual encuentro de una exquisitez literaria genuina.... a veces no es necesario empezar a escribir cartas a la distancia, hacia otros lugares o hacia otras personas; a veces es suficiente con escribirlas a ese corazón que todos llevamos dentro, a ese entrañable amigo que nos ha comunicado y nos comunica tantas cosas y a quien por la prisa de la vida tenemos a veces tan olvidado....

No puedo imaginar la vida sin mis queridas letras, quizá sea por eso que les insto a que le escriban a ese corazón que late dentro de ustedes a la espera de que un día lo recuerden, de que un día escuchen lo que tiene para decirles, pero el ser humano es tan basto en la forma de expresar sus emociones y tan único a la vez que cada cual puede elegir el mejor modo para comunicarse con ese entrañable amigo que vive dentro de cada uno.

Con seguridad quienes gusten compondrán melodías que un día también alegren nuevos corazones, o pinturas que harán que el alma se expanda de felicidad, sea cual sea el mensaje que uno quiera transmitir siempre reflejará el sentimiento que uno lleva por dentro, ese que hace que nos demos modos de transmitirlo porque para eso fuimos creados....

¿Cómo poder hacer uso del talento que Dios nos ha otorgado si no somos capaces de conversar con nosotros mismos?, si no somos capaces de conocer muy bien ese corazón muchas veces destrozado, que ha tenido que volver a componerse para poder seguir infundiendo vida a un espíritu desesperado por conocer la vida, tal cual es..... A veces llena de dicha, llena de amistad, y otras llena de decepciones, de traiciones o de despedidas.

¿Cómo saber quienes somos si nunca hemos prestado atención a ese corazón que languidece dentro de nosotros gracias a nuestro olvido?. El ser humano se pasa muchas horas de su vida y desgasta muchos pensamientos e ideas buscando la manera de alejar la soledad de su vida, tratando, a veces sin éxito; de rodearse de muchas personas, de encontrar ese amor que llegará para iluminar cada rincón de su ser, tratando de escapar a su propia presencia, a esos momentos en los que la soledad llega y uno simplemente opta por tomar sus cosas y salir corriendo a la calle, aunque sea solo a caminar un poco y ver a los demás caminando por las calles incluso si no van a su lado.

¿Por qué temer tanto a la soledad?, porque ella nos cuenta cosas que no son agradables de recordar, porque muchas veces ella nos recuerda nuestras caídas, nuestros fracasos o nuestras ausencias, porque ella siempre llega para obligarnos a iniciar ese diálogo con nosotros mismos, para invitarnos a mirar en nuestro interior y descubrir quienes somos realmente, a conocernos y a disfrutar de nosotros mismos!!!,a curar esas heridas que aunque a un lado siguen lastimando.

Alguien a quien quiero enormemente me dijo una vez "Si uno quiere conocer a esa persona especial de la cual se enamorará perdidamente primero tiene que enamorarse de uno mismo". Desde entonces me he invitado a tomar un café, a escuchar música, a comentar sobre un nuevo libro más veces de las que me hubiera imaginado, he paseado tantas veces por los parques y las calles, disfrutando de un delicioso helado, sin mayores compañías que la mía y he sostenido diálogos tan largos en los cuales no creo haber hablado más en toda mi vida!!!!.

Escribirle cartas a un corazón destrozado es recordar que dentro de nosotros vivimos nosotros mismos, es ser los primeros en contarnos todo lo que nos pasa; es descansar por las noches sabiendo que siempre habrá alguien que quiera escuchar ¿cómo nos fue durante el día?, es saber que siempre habrá alguien dispuesto a consolarnos y que será el primero en soltar una carcajada cuando algo gracioso nos haya pasado!!!, una que haga que empecemos a reír con el corazón abierto, es saber que no hay nadie más en el mundo que entienda mejor lo que pensamos que nosotros mismos.... Es hacer de nuestro corazón nuestro primer amigo.

No entendí sino hasta hace solos unos días, aquello que Dios nos dice todo el tiempo: "No estas solo", pude comprender esto cuando perdí a cuantos creí importantes en mi vida, personas y seres queridos que hoy llevo en ese enorme baúl de recuerdos, y fue solo cuando realmente me vi en completa y absoluta soledad que pude constatar que evidentemente no se esta solo, uno siempre tiene a Dios a su lado, susurrándole al corazón que no tenga miedo, que no hay sendero por largo y oscuro que sea en el que no vaya junto a tí....

Escribirle cartas a ese corazón destrozado que ha tenido que pasar por todos esos estados de ausencia y "soledad" es hablarle directamente al único que es capaz de permanecer junto a tí, incluso en momentos en los que ni siquiera tú quieres hacerlo, es saber que nunca más se estará solo aunque no haya nadie más a tu alrededor porque Dios te ha presentado contigo mismo y ahora que te conoces puedes ver que él va junto a tí.

Eran necesarias todas esas caídas porque ahora eres capaz de crear cosas maravillosas, de transmitir esa paz y esa felicidad que solo el disfrutar de quien eres puede darte, porque ahora sabes que eres una maravillosa y perfecta creación que Dios soñó un día a la cual llamó por tu nombre; porque ahora tu espíritu es tan fuerte que nadie puede lastimarlo, nadie tiene el poder de hacerlo, solo tu.

Escribirle cartas a un corazón destrozado es recorrer un camino en solitario cuya única parada es el conocimiento de nosotros mismos, es aprender a enamorarnos de nosotros mismos!!!!.

Que esta semana, disfrutes de enormes momentos de felicidad!!!. Les dejo con este precioso poema de Mario Benedetti y una inigualable melodía!!!. Hasta la próxima.









No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tomar un tiempo para compartir. Vuelve cuando quieras.