domingo, 28 de mayo de 2017

SEGUIR, SIMPLEMENTE ESO

Amigos!!:
¿Cómo están?, finalizamos Mayo, que precioso mes el que vamos concluyendo!!. Recordemos siempre que la mejor forma de vivir es atesorando  los mejores momentos en el corazón, bailar con la vida y no dejar de hacerlo jamás.

Precisamente sobre esto es que quiero escribir esta semana, ¿cuántas veces en la vida hemos atravesado por momentos difíciles?, situaciones insondables que jamás elegiríamos; situaciones que invariablemente han minado nuestro espíritu; que nos obligaron a detener el paso, a dejar de caminar, a dejar de intentar....

Somos muchos los que recorremos el sendero de la vida con lecciones muy duras por aprender, lo cierto es que a los alumnos más avanzados se les entrega las lecciones más difíciles porque están preparados para un mayor conocimiento. Aceptar esto en la hora de la dificultad, probablemente no remedie nada, nos nos devolverá la paz ni instalará la solución o el bienestar en el alma, simplemente todo continuará su curso, aunque muchas veces esto solo signifique CONTINUAR después de haberlo perdido todo, incluso las fuerzas para seguir.

¿Han atravesado alguna vez por un tiempo tan oscuro que no podían ver la salida?, si alguna vez han estado en esa situación sabrán del increíble esfuerzo que uno hace para remediar las cosas, con el consiguiente agotamiento espiritual al constatar muchas veces con desesperación, otras veces con resignación y en otras con amargura que todo fue inútil. Empezamos a preguntarnos por qué, generalmente no obtenemos respuesta alguna. Simplemente lo que jamás quisimos, aquello que jamás imaginamos sucedió sin que hayamos podido hacer nada al respecto.

Sin embargo hay una sola cosa que queda por hacer, seguir adelante, aunque muchas veces ese futuro ni siquiera lo queramos o lo tengamos claro; aunque ni siquiera nos queden las fuerzas necesarias para seguir, aunque ese "seguir" signifique solo continuar con el camino, así con lo poco que nos quedó en el alma, con todas las preguntas sin responder..... respuestas que nunca llegarán.

El tiempo cura todas las heridas, ¿escucharon esto alguna vez?, con seguridad lo hicieron, entonces también deben saber que el tiempo pasa, claro que sí; pero en definitiva no cura las heridas, éstas simplemente cierran por fuera, a la espera de que un recuerdo, un encuentro, un lugar o una palabra las vuelva a abrir, tal vez el tiempo pasó pero nosotros nos detuvimos en ese instante, en ese momento....

Continuar el camino no se limita a solo despertar un día después del otro, seguir el camino significa dejar atrás también, todo lo que causo dolor, dejar de recordar una y otra vez por todo lo que se pasó. Seguir significa que cerramos esas heridas con nuestras propias respuestas, ya no las esperamos, las encontramos en el fondo del alma, allí donde el proceso de sanación se produce, con cada día que pasa.

Para poder seguir hay que dar todo de uno mismo, exigirse mucho, pero sobre todo no dejar que las circunstancias contaminen tanto nuestro corazón que nos quiten la esperanza, pues por muy dolorosa que haya sido la caída, siempre hay algo mucho mejor mas adelante que nos esta esperando; a veces ese "algo mejor" solo es regresar exactamente a nuestro punto de partida, a ese momento exacto en el que pensamos que eramos felices, que no nos faltaba nada, solo que ahora somos distintos, ahora conocemos mucho más que entonces.

El tiempo si nos deja claridad, sucede que sobrevivir a la tormenta nos permite ver que habían muchos elementos que precisaban encontrar su lugar, aunque muchas veces esto signifique que estén lejos de nuestro camino..... 
A veces sentimos que estamos en el punto más alto de la vida y de pronto caemos al vacío, así ; sin previo aviso, simplemente termino, de nada servirá sentarnos a mirar lo que se ha perdido, de nada servirá sentarnos a esperar que las circunstancias cambien, porque aunque nos duela reconocer las circunstancias ya cambiaron aunque eso no nos haya hecho feliz en ninguna forma. El tiempo pasa y se lleva con él aquellos días que probablemente calaron hondo en el alma.

Hace un tiempo escuché decir que aferrarse a aquello que se fue es solo apego; respeto mucho a las personas que sufren porque sintieron en el corazón un cariño o un amor muy grande; para mi esas personas muestran su lado más humano, porque es normal y comprensible el dolor cuando se ha querido mucho o se ha intentado todo antes de renunciar.

Continuar el camino será por lo tanto lo más valiente que se haya hecho jamás; levantarse y comprender que aquello que nos hizo felices un tiempo de nuestras vidas simplemente culmino.
Hay que tener voluntad para aceptar que fuimos felices pero que ese tiempo no termino con nuestra vida, que todavía queda mucho camino por recorrer, que mejores momentos llegaran, porque creemos que así será y creemos porque confiamos en que Dios sabe lo que esta haciendo, porque él nos tomo como a sus mejores guerreros para abrir el camino a los que vienen detrás.

Todo, absolutamente todo aquello en lo que creemos llegará a nuestra vida en la medida en que confiemos en Dios, en la medida en que aceptemos que nada se ha perdido, que pasamos por una transformación necesaria para poder continuar.
SEGUIR, significa que agradecemos por el tiempo vivido en el que fuimos inmensamente felices  a la espera de tiempos nuevos y mejores en los que con seguridad volveremos a ser felices y lo seremos mucho más porque ahora conocemos el camino para salir a flote cuando una nueva tormenta se aproxime.... SEGUIR, CONTINUAR, AUNQUE MUCHAS VECES NO SEPAMOS MUY BIEN HACIA DONDE VAMOS.... SEGUIR, SIMPLEMENTE ESO.

Que tengas una semana más que plena!!!. Hasta la próxima.






domingo, 21 de mayo de 2017

NO SON LOS AÑOS....

Amigos!!!:
¿Cómo están?, feliz domingo!!!, cómo los encuentro esta semana?, recordar que hay más de mil razones para ser feliz, no dejen que unas cuantas caídas y unos cuantos errores les nublen la visión.
Este día celebrando que Real Madrid haya sido el nuevo campeón de la liga española.
Muchas veces para mantenerse a flote es preciso aferrarse a las cosas buenas y bonitas de la vida!!, para mí el football es una de ellas y para ti?.

Alguna vez escucharon decir "la vejez es un estado mental"?, o "la juventud se lleva en el alma"?, personalmente he escuchado a muchas personas decir frases como esta, en mi opinión las dos son posturas muy valederas, pues nuestro bienestar se escribe con cada uno de nuestros pensamientos, eso que muchas veces escuchamos decir o que leemos en algún libro; lo cierto es que cada una de nuestras vidas dependen en gran medida de la actitud con la cual encaramos nuestros días.

Con el paso de los años, sentimos que llevamos una carga muy pesada y poco a poco empezamos a caminar más y más lento, pero ese caminar lento, ese hastío de la vida no es por los años vividos, es realmente por la carga que no hemos sido capaces de soltar con los años.

Decidir guardar en la mente cada ocasión en la que nos sentimos humillados, cada pena con la que se llenó el corazón, cada momento de rencor o de odio, nos lleva con los años a caminar cada vez más cansados, la vida se nos hace cuesta arriba y nos ocultamos tras la excusa de la vejez.

El cerebro tiene la capacidad de generar un nuevo número de neuronas a los 70 años aproximadamente y si esa no es una gran invitación que el cerebro nos hace para encarar los días venideros a pleno, entonces realmente no sabemos cómo vivir.
No son los años los que pesan, son todas las emociones que no hemos sabido dejar ir las que pesan, las que nos ponen trabas en el camino.

Es innegable que hay caídas que nos dejan heridas tan profundas que jamás volvemos a ser los mismos, pero si además de ello elegimos cargar con su recuerdo, con aquello que sucedió y lo repetimos una y otra vez, tarde o temprano nos enfrentaremos con la necesidad de superar aquello que paso, y lamentablemente es así, porque la salud emocional termina dañando también la salud física, no es extraño que en la vejez cada enfermedad sea mucho más severa.

No son los años los que socavan la salud física, son todas aquellas cosas que en su tiempo no fuimos capaces de soltar, de dejar ir; es realmente la actitud con la que encaramos la vida la que nos llevara a una vejez en paz, en tranquilidad.
Esa paz y esa tranquilidad, ese dejar ir todo lo malo que nos sucede. Pero no es solo decir, no son solo palabras, no es solo la actitud positiva que uno pueda tomar, es en suma caminar la senda del perdón.

Ese perdón que cae en el alma como bálsamo de paz, es ese perdón que nos lleva a enfrentarnos con nosotros mismos y reconocer que hemos cometidos errores que probablemente nos llevaron a perder más de lo que en su tiempo pudimos imaginar, pero que ya pasaron. Revisar el pasado solo para aprender y continuar el camino con la paz que solo el perdón puede otorgar.
De la misma manera conseguiremos asegurar un futuro tranquilo, sereno; cuando miremos a quienes lastimaron profundamente nuestra alma y seamos capaces de perdonar.

Lo que reste por vivir, que este lleno de alegrías, de paz, de esperanza, limpiemos nuestro camino de toda esa carga pesada que en su tiempo no fuimos capaces de dejar.

Que este semana, llenes tu corazón de paz. Hasta la próxima!!!.





domingo, 14 de mayo de 2017

¿CUAL ES TU MALETA?

Amigos:
¿Cómo están?, ¿cuáles han sido las buenas novedades de la semana?, por mi parte dedicándome a lo que más disfruto que es escribir, esta semana también celebré que el Real Madrid pasara a la final de la Champions League, aunque realmente lamenté que tuvieran que cruzarse en estas instancias dos equipos que dan tan buen espectáculo como lo son Atletico de Madrid y Real Madrid, pero así son las cosas del football.
Creo que es mejor hablar de football que reparar en cómo anda el mundo; es necesario y mucho más en nuestros tiempos rodearnos de todo aquello que nos hace felices....



Esta semana quise comenzar con este video porque creo que nuestros tiempos se ven bien reflejados en él; creo que hemos ocupado tanto el tiempo con las cosas que menos importan que abandonamos a aquellos que precisan de nosotros y por otro lado, a veces queremos cubrir tantas soledades que empezamos a tomar tan en cuenta a la tecnología como si con ella consiguiéramos reemplazar a la humanidad ausente; por lo menos eso es lo que yo creo.

¿Les ha pasado alguna vez que han querido cambiar la situación de una persona, no han comprendido por qué tenían que conocer a determinadas personas que les han hecho daño o simplemente no han estado de acuerdo con la manera en la que uno vive?.
Hace unos días, conocí a una señora muy preocupada por la vida de sus hijos, como debe ser; se angustiaba porque no estaba segura de que la novia de uno de ellos fuera buena para su hijo, así como se lamentaba porque el otro hijo había tenido muy mala suerte en la vida.
Estas y otras preocupaciones se nos presentan constantemente cuando pensamos en nuestros seres queridos, pero hay algo que se nos olvida y es que la vida que le toca a cada uno distinta e irremplazable.

A este camino particular que recorremos cada uno me gusta llamarlo maleta, todos vamos caminando juntos por la vida es cierto, pero a cada uno nos ha tocado una maleta distinta. cada una de ellas tiene el número exacto de personas que iremos conociendo por la vida, el número exacto de aquellas que despediremos y el número exacto de aquellas que permanecerán junto a nosotros; la cantidad de eventos afortunados o desafortunados, nuestros logros y nuestros errores, en la maleta de algunas personas estará también formar una familia.

Es bueno reparar en este tipo de cosas, pues es inevitable que cuando queremos a alguien e incluso en nuestras propias vidas, empecemos a preocuparnos más de la cuenta; nos preocuparán las amistades de los hijos o de los conyuges, nos entristecerá las adversidades y traiciones de otros o de nosotros mismos. Lo cierto es que haríamos mas ligero el camino si lo recorriéramos aceptando que a cada quien le tocará pasar exactamente por aquellas vivencias que le ayudarán a crecer como persona.

Esto de crecer como persona no es menos importante pues a medida que avanzamos en la vida, nos vamos dando cuenta que hay personas que comprenden a la perfección las mismas cosas que nosotros y otras que probablemente no lo hagan y no por eso están equivocadas, se trata simplemente del hecho de que no todos vamos al mismo nivel del aprendizaje, lógicamente hay personas que van cursando niveles inferiores y otras que cursan niveles superiores, recordemos que vamos todos a la escuela de la vida.

Por esta razón quizá hayan personas que se den cuenta mucho más rápido lo que uno debería o no hacer pero a la vez debe respetar los tiempos de cada persona, no puede imponer su parecer aunque crea tener la razón; porque cada persona viene con todo lo necesario en su maleta para recorrer su camino, no tiene mucho sentido que alimentemos la preocupación o la tristeza, quizá aceptar esto en este momento también sea una lección para alguien.

Ahora bien, cuando uno de nosotros hemos tenido el infortunio de conocer a alguien que nos ocasionado un enorme sufrimiento, que nos traicionó, que nos abandonó; sea cual sea la situación que esta persona haya propiciado para lastimarnos, es bueno tener en mente que probablemente esta experiencia desafortunada y esta persona en concreto ya estaban en nuestro maleta cuando vinimos a este mundo, que no había nada que hubiéramos podido hacer para evitarlo; pero lo que sí podemos hacer es aprender lo que esta lección trata de decirnos, mejorar como personas porque finalmente eso es lo que verdaderamente importa.
Por otro lado, es bueno recordar también que las personas no vamos en el mismo nivel de aprendizaje, que probablemente esta persona nos lastimó por ignorancia, porque realmente no sabe lo que nosotros ya aprendimos en su momento, aceptar que muchas heridas fueron provocadas por una ignorancia disfrazada de maldad, hace que podamos alcanzar el perdón, no porque esta persona vaya a seguir en nuestra vida, pues probablemente conseguiría lastimarnos más; más bien porque el perdón reemplaza la amargura que puede estar oscureciendo nuestra alma; el perdón que nosotros otorgamos lo hacemos más por nuestro propio bien.

Finalmente reconocer que es bueno aceptar a las personas exactamente como son y no esperar que cambien, por lo menos no del modo que nosotros quisiéramos; es probable que una persona cometa errores estando a nuestro lado, es probable que nosotros hayamos cometido errores porque realmente no hay personas perfectas, pero es saludable aceptarlas como son, sabiendo que no pueden hacer más de lo que hacen, que probablemente jamás harán aquello que nosotros esperamos y que eso no necesariamente significa que no nos quieran.

Es preciso aceptar que las personas son como son que ellas y nosotros vamos aprendiendo, que a cada uno nos han tocado maletas diferentes y que todo; absolutamente todo, lo que va dentro de ellas (alegrías, decepciones, logros, derrotas, personas "buenas", personas "malas", amigos, hermanos, padres, esposos, hijos) contribuirá a nuestro crecimiento y que éste es tan singular como lo somos cada uno de nosotros.

Que esta semana disfrutes de cada cosa y cada persona que forma parte de tu vida. Hasta la próxima!!!.


domingo, 7 de mayo de 2017

EL OTRO LADO DE LA VIDA

Amigos!!!:
¿Cómo están?; creo que alguna vez se los comenté; encuentro que el tiempo es cíclico. Año tras año comenzamos un nuevo año, pero cada año reinicia un tiempo de 365 días, con las mismas fechas por celebrarse, incluso nuestros cumpleaños llegan año tras año, entonces lo que verdaderamente marca el paso del tiempo somos nosotros, que ya no somos los mismos de antes, voy a parafrasear un poco el verso del ya muy conocido poema 20 de Pablo Neruda. 
El hecho es que no solo cambiamos físicamente al envejecer un poco año tras año, lo hacemos también en el alma, desde las experiencias que vivimos año tras año y éstas sí que no se repiten, somos nosotros los que pasamos con el tiempo, y considero que este "pasar" esta completamente direccionando a aprender.

Pasamos a travez de tamises, porque vamos purificando el alma; vamos conservando aquello que nos hace bien y por supuesto eliminamos, nos deshacemos de todo aquello que realmente nos contamina.
Creo que es algo fácil de decir o escribir en este caso; pues este simple proceso que transcurre a lo largo de nuestra vida muchas veces nos toma toda una vida asimilarlo.
Con seguridad a muchos de ustedes que me siguen en la lectura ya les habrá sucedido que pierdan así de la forma más inesperada algo o a alguien que les reportaba mucho bienestar. Creo que son muy pocas las personas que reciben bien una pérdida o un cambio de cualquier índole, lo cierto es que la mayoría de nosotros nos quedamos atrapados en "aquel" tiempo, lo traemos a nuestra mente una y otra vez, nos resistimos al cambio.

Cuando uno ha atravesad muchos cambios - pérdidas en su vida; empieza a darse cuenta que siempre traen algo bueno, nos hacen una mejor persona; cuando menos aligeran la carga con la veníamos caminando.
Entre más rápido asimilemos esto, mucho más pronto comenzaremos a caminar; porque de eso se trata realmente, de no dejarnos detener por nada ni por nadie. Nada es tan importante como para dejar de avanzar en nuestro camino y les aseguro que aunque uno no quiera, el tiempo y la vida nos mostrarán que seguimos a pesar de todo.

Es preciso darle la bienvenida a todo lo que vivimos, hay algo bueno en cada momento de angustia o tristeza y es que esos momentos llegan para hacernos mucho más humanos, para que más adelante podamos comprender con claridad y porque no, podamos ayudar a quien este pasando por lo mismo que nosotros pasamos un su día.

Si pudiéramos coscientizar lo importantes que somos cada uno de nosotros para remediar este mundo, empezaríamos a darle más valor a todo lo que sucede en nuestro interior. No es buscando en las cosas fuera de nosotros o en las personas que llegan a nuestra vida que conseguiremos la felicidad; esto se logrará solo cuando busquemos en nuestro interior lo que de alguna manera ya aprendimos, lo que aún nos falta por aprender, saber exactamente quiénes somos y partir de ahí descubrir lo que realmente constituye nuestra felicidad.

La vida no es una competencia, no es un cúmulo de reglas que sirven para todos por igual; ya perdimos demasiado tiempo jugando a ser "personas mayores", ahora es necesario que realmente vivamos como adultos, concientes de que solo sirve aquello que podemos conseguir honestamente.
A veces pienso en la palabra "honestidad" y me pregunto ¿dónde la hemos dejado?, lo más preocupante es que no lo seamos ni siquiera con nosotros mismos....

Ya es  tiempo de recuperar el mando de nuestra propia vida, de acogernos a lo que realmente llenará nuestro espíritu, prestemos atención a cada una de nuestras emociones, no debería ser normal despertar cada día con tedio, con aburrimiento para asistir a un trabajo que no nos hace felices, no debería ser normal tener que "soportar" a quienes nos lastiman o nos hacen daño de hecho creo que las personas que lastiman y hacen daño son las que más ayuda necesitan.

La vida es solo una, personalmente encuentro que Dios nos ha dado el tiempo suficiente a cada uno para que podamos comprender de qué trata la vida realmente. Llenemos nuestros días con trabajo, con la familia, los amigos, con lo que ustedes quieran, pero que todo aquello que elijan los llene de bienestar de dicha, que no pase un solo día en el que no recuerden haber sido felices por lo menos un poco y recuerden que la propia felicidad jamás esta cifrada en el sufrimiento de alguien más.

Tenemos que enfrentar un cúmulo de responsabilidades cada día, es cierto pero la primera responsabilidad es para con nosotros mismos, ¿estamos realmente llevando la vida que queremos? y si no es así ¿qué tiene que cambiar para que esto suceda?..... Jamás encontraremos nada buscando en el exterior, la vida transcurre en todo aquello que tiene la capacidad de modificarnos interiormente, no te pierdas lo más bonito de la vida.

Que esta semana encuentres felicidad. Hasta la próxima!!!.