domingo, 26 de marzo de 2023

LUCIERNAGAS EN LA OSCURIDAD

La vida es muy simple en realidad, sentirse vivo es algo completamente distinto. Todos, nacemos con nuestro camino trazado, nuestra alma conoce a la perfección la ruta de nuestros sueños y es esa pequeña luz interior que se acrecienta con los años la que va alumbrando cada uno de nuestros pasos. Esto no tendría por qué convertirse en nuestra mayor conquista, y sin embargo es así.

Lo penoso es que las más de las veces atravesamos por mares de dudas, oscuridades por las cuales atraviesa el alma, y a veces esos espacios de oscuridad llegan casi a apagar nuestro luz interior.
A veces es muy claro lo que tenemos que hacer, a veces es muy claro dónde se esconde la felicidad, así lo manifiesta Paulo Coelho cuando dice que todos, al menos cinco minutos de cada día, tenemos bastante claro lo que debemos hacer, entonces ¿por qué es tan difícil seguir la ruta de nuestros sueños?, sencillamente porque nos perdemos en un mar de dudas, en un mar profundo y oscuro que a veces termina por llevarnos en una dirección completamente diferente.

Seguimos caminos equivocados, como oasis en el inmenso desierto, "nos perdemos de vista", y ese por lo general es quizá el momento más decisivo de nuestras vidas, porque vemos todo el camino recorrido, todos los años que han pasado y empezamos a contarnos el cuento de que es demasiado tarde y nos dejamos llevar, como cometas al viento...

Hay mucho que interfiere en nuestro camino. Creo firmemente que existen seres de luz a nuestro alrededor, que en nuestro paso por la vida conocemos muchas personas que llenan de luz nuestra existencia, que nos impulsan a seguir la ruta de nuestros sueños y muchas veces son la luz que nos falta en un mar oscuro y lleno de dudas. 
La vida transcurre en medio de claroscuros, así también nuestros días están llenos de seres de luz y de oscuridad y a es éstos últimos es a los que hay que saber distinguir para no dejarnos arrastrar por una oscuridad llena de sueños perdidos, de derrotas y largos días de amargura, una oscuridad llena de almas derrotadas.

Estos seres de sombra, fueron seres de luz un día, pero simplemente se dejaron llevar por las adversidades, se aferraron de personas que poco a poco fueron sumergiéndolas en un abismo sin fin..... Uno de tanto intentar y tanto caerse, termina por contaminarse y muchas veces el cambio es tan imperceptible que sucede casi sin que nos demos cuenta, hasta que finalmente se ha hecho demasiado tarde.

No creo en los sueños perdidos, ellos se alimentan de la esperanza, de la ilusión, los combustibles que encienden nuestra luz interior, y nada de ello depende de los años que se hayan vivido o no; si terminaste por aceptar que es demasiado tarde, es porque empiezas a hundirte en la más profunda oscuridad. Solo recuerda que si no esta bien, entonces aún no es el fin.

Muchas veces la vida nos exige ser como luciérnagas en medio de la oscuridad, somos seres de luz, llevemos luz a la vida de aquellos que se cruzan en nuestro camino, elijamos ver la felicidad en lugar de todo aquello que consideramos perdido o ausente.

Quizá hayas escuchado muchas veces decir, que cuando moramos, se nos pedirán cuentas de lo bueno o lo malo que hayamos hecho, a esto yo le añadiría que se nos pedirán cuentas por toda la felicidad que dejamos pasar, en el más simple de nuestros días, por estar demasiado concentrados en lo que "nos falta", por dejar que aquello que nos lastima perdure en nuestra mente y en nuestra alma más tiempo del que necesitamos para aprender las más grandes lecciones!!.

Somos seres de luz y las más de las veces hace falta que nos comportemos como luciérnagas en medio de la oscuridad, si acaso es preciso seguir el rastro de luz que dejan otros, para retomar nuestro camino con mucha más fuerza, pero jamás, jamás le permitas a nadie que apague la luz que brilla en ti.
No son los años que han pasado, son los años que aún tenemos por delante los que de verdad cuentan....




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