domingo, 30 de junio de 2013

EL MUNDO ES MAS PEQUEÑO DE LO QUE PARECE!!!

Amigos, ¿Cómo están?:
¡Qué semana hemos tenido!, verdad?, cuantas novedades gratas y otras poco gratas, pero estamos aquí!!, hemos logrado llegar a un nuevo fin de semana y a un nuevo fin de mes también!!!, sea lo que sea que se haya vivido días atrás, somos "triunfadores" por el solo hecho de seguir vivos y porque nos sentimos vivos en cada cosa que hacemos, ya solo por eso y por ser capaces de levantarnos de nuestras caídas!!.

Resulta que esta semana dedique algo de tiempo para ir al cine, y la vida puede sorprendernos incluso en las tareas mas insignificantes, incluso si creemos que estamos pasando solo un corto tiempo de diversión, las lecciones, las enseñanzas o tan solo las pequeñas señales se pueden encontrar incluso en películas que muestras superhéroes extractados de tiras cómicas!!.

Al salir de la sala cinematográfica, tenía una sola pregunta en mi mente: ¿Cuántas veces sentí que el mundo era demasiado grande?. Creo que no necesitamos ser superhéroes para darnos cuenta que en el mundo hay demasiadas cosas con las cuales no podemos lidiar o que realmente nos desagradan o quizá en definitiva aquellas que son necesarias para nosotros y con las cuales paulatinamente aprenderemos a vivir.

El resultado es que empieza a invadirnos el temor, no somos capaces de manejar con pericia cada nueva experiencia, cada caída, cada suceso favorable o desfavorable, cada frustración, cada alegría; y es que mayormente oscilamos entre batallas que ganamos o perdemos en medio de esta gran guerra por seguir vivos.

Vemos un mundo tan grande!, lleno de problemas, de injusticias, de abusos de poder, de violencia, de corrupción, de ambiciones desmedidas, de soledad, de abandono, de pobreza (material y espiritual), son tantas las cosas que vemos que sentimos que no podemos hacer nada, nos inunda la desesperanza, el miedo, la tristeza.....

Pero quizá el mundo es más pequeño de lo que realmente nos parece!, todo nuestro ser; principalmente nuestra mente; se distrae con tantas cosas, que deja de ver que todavía hay cosas buenas dentro de esto que llamamos mundo; las distracciones de la superficialidad, del egoísmo, de la búsqueda agotadora del amor, terminan por alejar nuestra concentración de las cosas pequeñas, de esas que aparecen sin hacer mucho ruido (tal vez por eso no las percibimos con facilidad) y es que la noticia de una guerra o la explosión de una bomba genera más atención que un cálido abrazo, que aquellas palabras de cariño que escuchamos cuando ni siquiera pensamos que alguien nos las diría.

El mundo es más pequeño, y menos habitado de lo que parece, solo hace falta notar la diferencia; existe mucha más vida en el dulce canto de un pájaro o en la risa de un niño o la mirada de una mascota que en todos aquellos lugares costosos que podemos encontrar, hay más vida en el corazón de alguien que ha conocido el amor verdadero que en los corazones de todas aquellas persona que se ufanan de tener mucho dinero.

¿Cuántas veces se ha oído decir que una sola palabra dicha con amor puede cambiar hasta el corazón más duro?, el mundo es en definitiva más pequeño de lo que parece cuando vemos el rostro de la persona que amamos y sentimos que nuestro corazón se inunda de felicidad cuando vemos  la felicidad en los ojos de esta persona....

Si dejamos que nuestros sentidos se turben con todo el bullicio y los falsos destellos de este mundo no conseguiremos ver ese mundo sencillo, lleno de vida que tenemos a nuestra disposición y que Dios ha puesto en nuestras manos, ¿alguna vez repararon en la sinceridad con que enfrenta cada uno de su días un niño?, ¿cuánto se maravilla con las cosas más pequeñas?, ¡ ellos viven en un mundo muy lejano al nuestro!, porque ven la vida con los ojos del alma. 

Cuando una pareja de ancianos se cruza por nuestro camino, podemos ver tanta vida en cada uno de ellos, han recorrido tantos años y todavía permanecen juntos, sus rostros llenos de arrugas cuentan una historia magnífica pues aunque su caminar es pausado sus expresiones encierran tanta paz, pero las calles ya no están llenas de ancianos o parejas tomadas de la mano, las calles están llenas de personas solitarias y presurosas, cuyos rostros afligidos, amargados, rencorosos cuentan la historia de sus vidas.

¿Cómo se puede distinguir la luz del sol entre la luz de un simple farol si nunca nos detenemos a ver el sol?, tampoco podremos distinguir la vida misma si solo nos centramos en todo lo que nuestros ojos ven y dejamos de ver las cosas más sencillas que son las más importantes, aquellas que solo se pueden ver con los ojos del alma.

El mundo se puede hacer más pequeño de lo que parece, porque ese mundo reside en las cosas más sencillas, solo tenemos que concentrarnos en ver aquello que es realmente importante y diferenciarlo de aquello que consideramos importante.

Les dejo con un  fragmento de la canción "Mientras tanto" de Tommy Torres. Que tengan una semana magnífica!!!. Hasta la próxima.

                     Solo hace fácil mirar alrededor
                     Ver tantas caras llenas de incertidumbre
                      los mas viejos se les ve tan tranquilos
                      por que saben que todo es tan relativo
                     Dicen
                     vivir con miedo
                     No es negocio
                     Solo para los noticieros
                     Lo que digo, es si el futuro es negro o blanco
                     Que vivamos
                     Mientras tanto 

Fotografía de Rosier Db


domingo, 23 de junio de 2013

LAS FOGATAS DE SAN JUAN

Amigos, ¿cómo están?:
Domingo de Junio, es bien visto que el frío y el calor se persiguen como dos amantes que nunca pueden encontrarse en el mundo, y es que en algunos lugares del mundo inicia el verano y en otros lugares del mundo inicia el invierno, aunque con lo cambiado que esta nuestro clima gracias al deterioro ambiental, hoy en día es difícil ver con la claridad de antes las diferencias y la belleza que cada estación trae consigo.

En algunos lugares del año se celebra la Fiesta de san Juan, ésta es una tradición que ha ido cambiando año tras año, al punto que hoy ha quedado como una celebración más que carece totalmente de las características que poseía en un pasado no muy lejano, unos años apenas; y es la celebración de San Juan hace algunos años consistía en prender una fogata, de ahí que en algunos lugares del mundo se conozca a esta celebración como "las fogatas de San Juan", alrededor de la cual amigos y familiares se reunían para compartir un grato momento, alegrar el corazón con la alegría de contar con los seres queridos cerca, los niños cantaban rondas de San Juan, de ahí la clásica melodía que a veces pasea todavía por mi mente: Aserrín, aserrán, los maderos de San Juan; piden pan no les dan, piden queso les dan hueso; piden vino sí les dan, se marean y se van!.

Hoy esta celebración ha quedado reducida a un simple cuento que uno va transmitiendo a los niños, cada año que llega una nueva celebración en las que apenas se reúnen unos cuantos con la excusa de San Juan, y es que el cambio climático (del cual somos enteramente responsables) impide en la actualidad el encendido de fogatas; ¡ Qué magnífico es nuestro paso por el tiempo verdad! que han terminado por destruir celebraciones como estas. Las personas no consiguen darse cuenta que son cada una de nuestras acciones, las que han deteriorado tanto este mundo, que ahora solo vivimos con recuerdos vagos de épocas maravillosas.

Hace un par de días mientras elaboraba la temática de un curso, pensaba en el significado de las fogatas de San Juan; ¿cuál era realmente el significado de las mismas?, entonces me di cuenta que tal vez hoy ya no podemos ver a los niños celebrar sanamente alrededor de una fogata o escuchar sus carcajadas sinceras mientras cantan una ronda, alegrando así nuestro corazón, pero ¿ese fuego se ha extinguido realmente?, ¿ha desaparecido así como así?....

¿Cuál es el fuego que da vida a nuestras vidas?, suele pensarse que es el amor y es que el amor es la mayor magia, la mayor fuerza de todas, es en definitiva el que impulsa el motor de nuestras vidas pues nuestro corazón se alimenta de él. Es en definitiva un fuego que nos da vida y mucha; pero ¿esto es así en su generalidad?; cuando caminamos por las calles y vemos tantos rostros tristes, tantos rostros que encierran mucha amargura, rostros desorientados fingiendo caminar con paso seguro, vemos gente cuyo corazón esta lleno de odio, de envidia, de rencor.... de todo menos de amor.

El paso de los años ha cambiado nuestra forma de ver la vida, estamos a años luz de distancia de aquellas tiempos que vivieron nuestros abuelos, nuestros padres, donde las relaciones interpersonales se cifraban en la amistad sincera, donde uno podía recibir ayuda sincera y desinteresada de algún compañero de trabajo, de algún vecino, uno podía disfrutar de las estrellas por la noche, quizá regresando a pie del trabajo, con la tranquilidad de llegar seguro a su casa, podía disfrutar de los árboles que exhibían majestuosos jardines que uno distinguía a su paso; hoy no podemos darnos el lujo de perder tiempo en estas cosas, después de todo se ha hecho ya muy conocida la frase "tiempo es dinero"; por lo que el ritmo de la vida ha cambiado también, ¿cómo tener tiempo de regresar a pie a casa?, ¡menos que vamos a tener tiempo de ir a almorzar en familia!, salimos tan agobiados de nuestros trabajos que lo único que se nos ocurre es llegar a casa para ver tele o reunirnos con los amigos, a ver si sus compañías nos hacen olvidar un poco las preocupaciones y desazones del día; ¡ qué importa llegar a comer en familia!.

Nos preocupa tanto el mañana, y no nos damos cuenta que nos estamos perdiendo el hoy; hace una semana mientras conversaba con algunas personas durante un almuerzo; una de ellas  dijo que toda su vida había tratado de vivir en el presente; "sueños siempre tuve" decía "pero nunca deje de pensar en el día de hoy"; mientras esta persona celebraba el hecho de estar viva, repare en los cabellos blancos de su cabeza, en las arrugas de su rostro y en la increíble tranquilidad y felicidad que denotaba éste..... Pensé por un segundo en todas las preocupaciones que lleve en mi mente a ese almuerzo, me di cuenta que yo también me preocupaba por las cosas que tendría que hacer en los días posteriores, mi mente encerraba un montón de supuestas dificultades, entonces comprendí que yo también estaba viviendo el día de mañana, aún sin saber si realmente esos posibles escenarios de dificultad llegarían, de todas maneras yo ya los estaba viviendo, ¡ ya estaba buscando una solución inclusive!.

Desde aquel almuerzo, me alegro de vivir cada día, no he dejado de soñar, no he dejado de planificar, pero esta vez enfrento las dificultades de cada uno de mis días, celebro mis aciertos en cada uno de mis días; disfruto más de lo que puedo ver cada día, que lo que quisiera ver el día de mañana.
Pero ¿cuál es el fuego que nos mantiene vivos?, ¿todavía lo tenemos?; a juzgar por este mundo que vemos diario, uno pensaría que no queda ninguna fogata por alimentar.

¿Por qué son las fogatas de San Juan?; uno puede encontrar un montón de significados si busca esta celebración; pero les diré lo que yo pienso que significa esto; no sé si esté en lo correcto o no; esta es mi forma particular de celebrar la Fiesta de San Juan hoy; pienso que Juan era quien anunciaba la llegada de Jesús; conocido como "la voz del que clama en el desierto"; las personas realmente no sabían a quien anunciaba, ¡pero él lo hacía de todos modos!; creo que hoy atravesamos muchos desiertos, nos sentimos desorientados en cada uno de ellos, porque ninguno tiene una ruta específica; salir del desierto en el que muchas veces se ha convertido nuestra vida, implica una gran fortaleza; Juan anunciaba la llegada de la vida, del amor, del perdón, de la paz, de la fe, de la esperanza, de todo lo bueno que viene de Dios aún cuando nadie comprendía lo que él anunciaba..... ¿por qué nos cuesta comprenderle hoy?.

Porque hemos dejado que el fuego de la vida se extinga en nuestro interior, porque ya no alimentamos la fe aunque las iglesias estén llenas de gente, ya no alimentamos la paz, ya no alimentamos el perdón, ya no alimentamos la esperanza. 
Aunque estemos rodeamos de libros, videos, etc,. que nos insten a seguir adelante, sino tenemos una razón de ser que nos muestre claramente ese camino que nos lleva adelante, seguiremos sumergidos en el desierto de nuestras vidas, pretendiendo que todavía estamos vivos!.

Hoy todavía hay muchas fogatas que encender y muchos fuegos que mantener; el amor es el más importante de todos, pero no es el único; es necesario que hablemos con nosotros mismos, que descubramos o redescubramos qué es lo que realmente queremos, ese camino que seguiremos a pesar de todo; con la mirada puesta siempre en nuestro presente, sabiendo que lo que traiga el mañana se enfrentar en su tiempo; y que todavía nos queda mucho por delante!. ¿Cuál es tu propia fogata de San Juan?.

Gracias por visitar este sitio, gracias por esos preciosos mensajes que me hacen llegar. Estoy pensando en un sorteo entre todos los seguidores de este sitio para hacerles llegar un ejemplar de mi segundo libro "El Ocaso de Nuestros Días", así que estén atentos.
Que tengan una semana maravillosa!!!!. Hasta la próxima.

Fotografía "Rosier Db"






domingo, 16 de junio de 2013

INDUDABLEMENTE HAY MUCHA MAS POBREZA DE LO QUE PODEMOS IMAGINAR

Amigos, ¿cómo están?:
¡Que  alegría estar al inicio de una nueva semana! y mucho mas aún haber podido llegar a este magnífico fin de semana, y es que cada día es una conquista y solo quien es capaz de llegar al final de cada jornada, semana, mes o año; es un triunfador y lo es mucho más si además ha conseguido mantener su corazón intacto a pesar de las caídas, la mirada puesta en ese mañana prometedor lleno de esperanzas y sueños....

Seguramente ya repararon en el título de esta nueva entrada, dicen que todo tiene una razón de ser, ésta no será la excepción de la regla, y es que hace un corto tiempo tuve la oportunidad de ver un video que reflejaba la pobreza que se vive en muchos lugares del mundo y no pude evitar pensar que mucha de esa pobreza es evidentemente responsabilidad de cada uno de los que vivimos en este mundo, ¿pero la respuesta esta realmente en mejorar las condiciones de vida de estas personas y recaudar todos los fondos que sean posibles, llevar víveres y otros menesteres; buscar financiamientos que permitan mejorar las condiciones de vida de estas personas?, ¿dónde esta realmente la respuesta para mejorar la condición de vida precaria que existe en muchos lugares del mundo?, ¿estamos realmente conscientes de la pobreza que hay en el mundo?.

Me he hecho estas preguntas una infinidad de veces y al final, solo he podido llegar a una sola conclusión, el ser humano vive un tipo de pobreza de la cual no estamos del todo conscientes, no es consiguiendo recursos financieros que podemos luchar con esta pobreza, porque una vez más nos enfrentamos a un mundo que no conocemos, que hemos olvidado hace tanto tiempo que nos parece que la única realidad que impera es la que vemos todos los días, pero ¿cómo querer mejorar la vida de otras personas si no mejoramos primero la nuestra?. ¿Cómo pretender que nos solidaricemos con la necesidad que viven otras personas cuando no podemos satisfacer nuestras propias necesidades?

Hace unos días, escuchaba un programa de radio, un programa en el que participé hasta hace algunas semanas, se leyeron mensajes que envió la gente y uno de ellos captó mucho más mi atención y es que se trataba de un mensaje en el que se pedía ayuda, y esta no se traducía a la necesidad material que uno siempre puede ver con cierta facilidad si se lo propone. Esta persona pedía oraciones por un ser querido que atravesaba un mal tiempo en su vida, entonces me dije: Este es el tipo de pobreza que nadie ve, porque las personas hemos dejado de reparar en el sufrimiento espiritual, la mayoría de los problemas se origina en un mundo que no se puede ver y que no se puede tocar, pero que en definitiva se puede sentir.

¿Cómo esperar que las personas ayuden  a otros "más desfavorecidos" si casi todos caminamos con el espíritu tan mal trecho que no conseguimos vivir bien?, son demasiadas las tareas por realizar en cada uno de nosotros primero, he visto mucha más felicidad en el rostro de aquellas personas "pobres y necesitadas" que en los rostros de quienes se ufanan de tener dinero.

Indudablemente hay mucha más pobreza en el mundo, de la que podemos siquiera imaginar, pero no somos capaces de verla porque estamos demasiado inmersos en las cosas de un mundo que todos los día nos recuerda lo que tenemos y lo que nos falta para vivir holgadamente.

La pobreza espiritual esta mucho más de moda de lo que podemos imaginar, las redes sociales muestran imágenes de ello con el agregado de que además las personas pueden comentar en ellas, como es el caso de la fotografía que una amistad me mostró hace unos días, en la que se ve el rostro de una persona golpeada por su pareja, cuyo comentario al respecto reflejaba su deteriorado estado mental, pero era mucho más doloroso leer las reacciones de las personas que comentaban, esta demás decir que la mayoría de ellas se reducía a comentaros fútiles que nada tenían que ver con la realidad.

¿Cómo pretender ayudar a los "más necesitados", si no estamos conscientes de nuestra propia necesidad?, debemos primero sanar nuestro propio espíritu, dejar de ver con los ojos vendados este mundo que nos invita todos los días a ser egoístas, corruptos, violentos, y todos las formas en las que el ser humano enseña lo enfermo que esta su espíritu. 

¿Cuándo empezamos a ser tan indiferentes al dolor humano?,¿cuándo empezamos a creer que solo la riqueza material o la belleza exterior es lo único que cuenta?, este mundo tiene muchos problemas, y creo que el más importante es la pobreza espiritual de la gente.

Un par de semanas atrás, recibí una maravillosa historia que la comparto con ustedes: 
Cuenta la leyenda que un hombre oyó decir que la felicidad era un tesoro. A partir de aquel instante comenzó a buscarla. Primero se aventuró por el placer y por todo lo sensual, luego por el poder y la riqueza, después por la fama y la gloria, y así fue recorriendo el mundo del orgullo, del saber, de los viajes, del trabajo, del ocio y de todo cuanto estaba al alcance de su mano. En un recodo del camino vio un letrero que decía: "Le quedan dos meses de vida.” Aquel hombre, cansado y desgastado por los sinsabores de la vida, sin haber logrado encontrar la felicidad, se dijo: "Estos dos meses los dedicaré a compartir todo lo que tengo de experiencia, de saber y de vida con las personas que me rodean." Y aquel buscador infatigable de la felicidad, sólo al final de sus días encontró que, dentro de sí mismo, en su interior, en lo que podía compartir, en el tiempo que dedicaba a los demás, en la renuncia que hacía de sí mismo por servir, estaba el tesoro que tanto había deseado. Comprendió que para ser feliz se necesita amar; aceptar la vida como viene; disfrutar de lo pequeño y de lo grande; conocerse a sí mismo y aceptarse así como uno es; sentirse querido y valorado, pero también querer y valorar; tener razones para vivir y esperar… y también razones para morir y descansar. Entendió que la felicidad brota en el corazón, con el rocío del cariño, la ternura y la comprensión. Que son instantes y momentos de plenitud y bienestar; que la felicidad está unida y ligada a la forma de ver a la gente y de relacionarse con ella; que siempre está de salida y que para tenerla hay que gozar de paz interior. Finalmente descubrió que cada edad tiene su propia medida de felicidad y que sólo Dios es la fuente suprema de la alegría, por ser Dios amor, bondad, reconciliación, perdón y donación total. Y en su mente recordó aquella sentencia que dice: “¡Cuánto gozamos con lo poco que tenemos, y cuánto sufrimos por lo mucho que anhelamos!" (Juan Rafael Pacheco) 

Evidentemente tenemos muchas cosas que arreglar en este  mundo, pero si primero no arreglamos lo que esta mal en nosotros mismo, será muy difícil que arreglemos lo que esta fuera, no hace falta ver la pobreza que existe en este mundo, porque cuando seamos capaces de ver la pobreza que existe en nosotros mismos,  seremos capaces de ayudar a quien más lo necesite, y éste será un acto totalmente voluntario porque seremos capaces de diferenciar aquello que esta mal, de lo que esta bien, dejemos por un tiempo de ver con los ojos de este mundo y empecemos más a ver con los ojos del espíritu.

Que tengan una semana maravillosa, llena de gratas experiencias. Les dejo con un fragmento del libro "El Ocaso de Nuestros Días".

….Tendría que decirle que después de que él se fue; las personas se dejaron llevar por la corrupción, muchos callaron por miedo, otros se dedicaron al narcotráfico, que el valor del dinero era lo que importaba ahora y que dolía mucho más la pobreza espiritual de la gente… que….. se empezó a vivir EL OCASO DE NUESTROS DIAS.

Fotografía de Rosier Db








domingo, 9 de junio de 2013

COMO UN BARCO QUE SIGUE SU PROPIA TRAVESIA

Amigos, ¿cómo están?:
Saben que sea cual sea el clima que Dios nos regale en cada uno de los días que atravesamos, cada uno de ellos es simplemente maravilloso, con todo lo que pudieron dejar o todo aquello que pudieron traer. Nuestras vivencias son únicas e irreproducibles y es bueno que estemos conscientes de esto para que valoremos en que o en quienes invertimos nuestro tiempo.
Esta semana ha sido para mi una buena semana, inmersa en nuevos proyectos, agradecida por las preciosas palabras que me hacen conocer quienes estén leyendo mi segundo libro, y es que desde que he iniciado esta maravilloso viaje por el cual me esta conduciendo la escritura, experimento vivencias maravillosas!!!. Considero que Paulo Coelho no se equivocó cuando en su libro "El Alquimista" hace mención que quien sigue su leyenda personal encuentra que todo el universo conspira para que ésta se realice.

Hoy me encuentro agradecida por todas aquellas personas que han compartido un tiempo de sus vidas conmigo, y cuyos caminos ahora siguen su propio rumbo, estoy mucho más agradecida con aquellas que todavía me acompañan y por todos ustedes que siguen este pequeño espacio cada semana. Es muy cierta aquella frase: "A quien te recuerda dale un poco de tu corazón y tu recuerdo".

Es precisamente pensando en esta frase que ha inspirado mi entrada de hoy, es que me animo a decir que muy pocas veces estamos conscientes de que las personas que llegan a nuestra vida son pequeños regalos que Dios pone en nuestras manos y que muy pocas veces valoramos a tiempo. El ser humano tiene la costumbre de resaltar lo que se ha perdido y no valorar lo que se tiene; creo que es parte de la vivencia humana.

Y es precisamente gracias a esta vivencia humana, que es muy diferente para cada quien que pienso que la vida sigue su propio curso como un barco que ha iniciado su propia travesía para llegar a su destino. Uno mismo es el capitán de su nave y cuenta con su propia tribulación para llegar a buen puerto, esa tripulación no es otra que aquellas virtudes y dones con los cuales nos diferenciamos de los demás y que en definitiva hacen de cada uno un ser único, lo que quiere decir que nuestra ruta es tan único como lo somos cada uno de nosotros. ¿Cuál es el puerto seguro?, tiene que serlo aquel a donde nos conducen nuestros sueños que son la brújula que va marcando nuestra ruta.

Sin embargo uno puede ir con el viento a favor o en contra, seguir a flote depende en muchas ocasiones de la paciencia con la que enfrentamos cada suceso desfavorable, paciencia para esperar que las acciones que tomemos nos conduzcan por la ruta trazada, paciencia para esperar el tiempo oportuno en el cual debemos tomar una decisión precisa, paciencia para entender que no siempre los resultados dependen de nuestras decisiones sino que también el destino juega un papel muy importante, paciencia incluso con nosotros mismos para no perdernos en el marasmo de este mundo y que éste no nos aleje de quienes somos realmente....

Es indudable que zarpar de un puerto seguro requiere de mucho valor de nuestra parte, pues dejar atrás la seguridad con la que se vive para lanzarse en pos de una nueva aventura, requiere que muchas veces agudicemos nuestras habilidades, que dejemos atrás a quienes contábamos por seguros y que no fueron capaces de entendernos y a pesar de que sabemos que probablemente cuando regresemos no encontremos nada de aquello que pensamos en un tiempo importante, nuestro corazón nos habla de muchos lugares y muchas personas que todavía nos falta conocer.

Y es en este intento de continuar nuestro viaje hasta el puerto que representa aquello que queremos, cuyo lugar nuestro corazón ha imaginado y anhelado muchas veces, que nos topamos con personas, lugares o hechos a los cuales les dimos más importancia de la que realmente se merecían y entonces nuestro corazón experimenta la decepción y ésta hace que sintamos que el suelo seguro en el que creíamos encontrarnos empiece a hacerse movedizo, éstas amargas experiencias nos hacen dudar de nuestra ruta, de nuestros sueños, de pronto el deseo de regresar nuestros pasos se hace cada vez más grande y si nos dejamos convencer por los pensamientos hirientes con los cuales solemos alimentar nuestra mente en épocas difíciles; nuestro viaje, nuestra "gran travesía" corre el riesgo de perderse.

Tenemos que tomar en cuenta que durante nuestro propio viaje la paciencia  alimenta mucho más el espíritu, que desde el autoconocimiento nos hacemos mucho más fuertes y que desde la perseverancia nuestra templanza se reafirma. Tres elementos sin los cuales no podríamos avanzar seguros aunque el mar de la vida quiera hacernos naufragar.

La vida transcurre en medio de muchos eventos para los cuales ni siquiera sabemos que estamos preparados  hasta que la vida se encarga de demostrarnos que lo estábamos, y aunque nuestros días se suscitan en medio de una gran incertidumbre, tenemos dos cosas por seguro: La primera de ellas, es que puede ser que falle todo a nuestro alrededor pero si hemos sido capaces de llevar nuestros días en base al respeto que nos debemos a nosotros mismos, seremos capaces de conocernos perfectamente y  a partir de allí dar pasos seguros aún en medio de la oscuridad que se presenta cuando llegan los problemas.

La segunda es que el amor que podemos sentir por los demás termina cuando empieza el que sentimos por nosotros mismos, desde esta perspectiva no dejaremos que alguien lastime nuestro corazón, porque además de Dios nadie puede darnos más amor que el que nosotros mismos podemos darnos y por lo tanto solo nosotros sabemos cuál es la ruta que nos conduce hacia aquello que soñamos, ese conocimiento con el cual hemos nacido y cuyo misterio reside solo en nuestro corazón.

Nadie nos garantiza que al seguir nuestra propia travesía no encontraremos fuertes temporales, vientos en contra o tempestades que quieran naufragar nuestro barco, ese al que llamamos vida. Pero ¡Animo! porque solo cae aquel que tiene valor para seguir su propio camino, las caídas solo son señales de que se esta avanzando.

Que tengas una feliz semana!!!. Hasta la próxima.



domingo, 2 de junio de 2013

ES SOLO TIEMPO DE NUESTRAS VIDAS....

Amigos, ¿cómo están?:
Inicia Junio y con él se va la mitad del año; muchos deben pensar que son solo días que se pasan como fechas que aparecen en un almanaque, pero con ellos se va también tiempo de nuestras vidas; por lo tanto el tiempo que vivimos debe ser siempre un tiempo de celebración y gratitud. Celebrar que estamos vivos y que todavía podemos enmendar lo que nos disgusta de nuestra vida o reforzar aquello que valoramos de ella. Gratitud por todas esas personas que forman o formaron parte de nuestras vidas con quienes se enriquecieron nuestras vivencias. No son solos días los que pasan.... ¡Es tiempo de nuestras vidas!.

Nuestra vida se mueve en ciclos que inician y otros que terminan, nunca vamos a saber si cada nuevo personaje que llega a nuestras vidas, nos acompañará por el resto de ellas o se perderá en el paso de los años para formar parte de aquellos viejos fantasmas que aparecen de tanto en tanto en nuestros recuerdos.

Sea cual sea la razón por la cual un ciclo de nuestra vida termina, es imposible no albergar cierto sentimiento de melancolía. y es que para nadie es agradable esa amarga sensación de haber perdido algo, aunque sea solo un poco de nuestro de tiempo.....

Creo firmemente que todas absolutamente todas las experiencias de nuestra vida llegan para dejarnos inmensas lecciones de vida, sin embargo como en todas las ocasiones de aprendizaje, existen algunas lecciones más difíciles que otras y no por eso mas o menos importantes, solo requieren de nosotros más atención y más valor.

¿A cuántas personas ya hemos dejado atrás en nuestras vidas?, ¿de cuántas de ellas todavía nos acordamos?, ¿qué lecciones nos enseñaron o compartieron con nosotros?. Bien sea que tengamos una respuesta para cada una de las preguntas lo cierto es que cada persona que llegó a nuestra vida en un momento determinado era la persona indicada... Todas las personas y todos los eventos son grandes regalos de Dios, para ayudarnos en nuestro camino de aprendizaje, es nuestra decisión recordarlas con cariño, gratitud o perdón.

Pero ¿qué pasa cuando sucede algo que no queríamos?, todo nuestro mundo se desestabiliza porque incomprensiblemente no estábamos preparados para ello y por lo tanto no sabemos que hacer, pero aún en esos momentos es preciso saber que todo lo que acontece en nuestra vida tenía que suceder, es inútil que pasemos un buen tiempo de nuestras vidas preguntándonos lo que debimos o no hacer. Solo nos resta comprender que  en definitiva no existía ninguna posibilidad de que fuera diferente y disfrutar cada una de nuestras vivencias.

Cuando uno asiste a un funeral o escucha a las personas referirse a aquellos que partieron de este mundo; me sorprende ver que todos los que partieron fueron personas "extraordinarias", de pronto nadie recuerda los defectos, las peleas, simplemente se recuerda lo buenos, alegres e incluso "sabios" que eran, entonces me pregunto si todas estas personas alguna vez estando vivas, escucharon los increíbles conceptos que sus conocidos tenían de ellos; quizá la tristeza llega un poco a mi corazón cuando pienso en esto, porque los seres humanos no siempre tenemos el valor de hacerles saber a las personas que son importantes para nosotros, la razón por la cual las tomamos en cuenta, simplemente dejamos que la vida pase y nos vemos inmersos en ese gran mar de "ocupaciones" cotidianas y uno a uno nuestros seres queridos se van perdiendo en el tiempo, hasta que un día reconocemos con pesar que "eran buenas personas"....

Nadie sabe en qué momento exactamente conoceremos a alguien que llegará para cambiar felizmente nuestra vida, desconocemos cuándo será ese día que veamos nuestros sueños realizados, es debido a esta incertidumbre que nos perdemos en medio de la desesperación, la duda o la tristeza. Es preciso que recordemos que Dios nunca nos haría soñar con aquello que sabe que no vamos a tener, pero el tiempo le pertenece solo a él y solo él sabe cuándo es el momento correcto...... Somos presas fáciles de la desesperación porque no reconocemos con paz en el corazón que todo, absolutamente todo en nuestras vidas sucede en el momento justo; nada llegará un minuto antes o después solo porque sintamos que nos estamos haciendo viejos para algo en particular.

Y así como debemos tener la suficiente templanza para esperar por aquello que realmente queremos, debemos tener el suficiente valor y firmeza para aceptar que un ciclo ha llegado a su fin. No sirve de nada que nos aferremos a algo que ya no forma parte de nuestro camino, porque aún cuando decidamos vivir en el mágico mundo de los recuerdos donde podemos volver a vivir lo que se ha perdido, lo que ha quedado  atrás permanecerá allí.

Como seres humanos cometemos el error de empezar a ver las cosas y las personas perdidas mejor de lo que las veíamos cuando estaban en nuestra vida y aunque gozamos de una extraña claridad cuando ya no hay nada que podamos hacer, debemos armarnos de valor para continuar con la seguridad de que no hay nada que se hubiera podido hacer diferente, no estamos equivocados al pensar que nos dejaron algo bueno, porque indudablemente es así; resta continuar nuestro camino, tratando de albergar la alegría de que gracias a estas experiencias y estas personas somos mejores que antes.

La vida, no transcurre como un libro que ya hemos leído, o una receta de cocina que conocemos de principio a fin. Con cada minuto vivido nos sorprendemos con nuevas experiencias y es nuestra tarea seguir adelante con la mirada fija en ese horizonte que anhelamos, sin dejar de ver cada paso que damos en este presente que se escribe con cada una de nuestras acciones.....

Que tengas una semana inolvidable!!!. Hasta la próxima.

"Para serte sincero Darko, yo si me siento agradecido con los Santiagos del mundo, porque basta seguir tu propio camino, de acuerdo a tus propias convicciones, para llegar a nuestras edades con la frente en alto. Tal vez no tenemos las fortunas de muchos, pero podemos al menos descansar en paz por las noches." (El Ocaso de Nuestros Dias)

Fotografía "Rosier Db"