domingo, 29 de diciembre de 2013

VIDA NUEVA....

Hola Amigos, ¿cómo están?:
A tan solo dos días de terminar el año, uno piensa si todo lo que pasó durante este año que se va, sirvió para que recibamos el año que viene como personas nuevas, fortalecidas por todas las experiencias amargas y con el corazón pleno por los momentos felices que trajo consigo.

¿Qué dejó este año para nosotros?, ¿qué pasos acertados o errados dimos?, con seguridad cada uno  ha tenido su propia experiencia y es que más allá de que concluyamos un año e iniciemos otro; recorremos nuestro propio camino… Dios ha puesto en nuestras manos esta vida, como el más preciado de sus regalos, Dios ha confiado en nosotros el destino de la humanidad, de esta humanidad que empieza por cada uno de nosotros; de esta vida traducida en aciertos y tropiezos, de esta vida que tenemos y a la que de tanto en tanto miramos con los ojos del alma, a la que debemos darle un sentido de FE, porque sin ella no comprenderíamos mucho de lo que nos pasa en este mundo que cada día intenta detener nuestro caminar, intenta sumergirnos en una cultura de muerte, ¿por qué?, porque los males de nuestros días se traducen en muchas guerras si, pero de esas que libramos interiormente: Mirarnos al espejo y saber que somos creaciones perfectas aunque muchos nos digan lo contrario, llegar a casa y regocijarnos con la presencia de nuestra familia, aunque nuestra casa sea humilde y nuestra mesa no este llena de manjares costosos, sentirnos felices trabajando en aquello que nos gusta aunque no nos reporte ingresos extraordinarios….

Estamos vivos, no es un decir; no son los días que pasan mes tras mes, años tras año; es tiempo de nuestros vidas y el valorarlo  implica saber que el tiempo es otro regalo de Dios, que puede ser que nos sintamos felices con la compañía de determinadas personas y es saber que las tendremos hasta que Dios así lo quiera, por lo tanto nunca esta demás incluir un “te quiero”, en nuestro día; no esta demás ser agradecidos por todas las bendiciones que Dios nos da, aunque el trajín de nuestra experiencia terrenal insista en quitarnos aquello que realmente importa: LAS COSAS DEL ESPIRITU; ese sonreír porque un rayo de sol ha tocado nuestro rostro, ese caminar pausado disfrutando la magnífica vista de la naturaleza, esa sonrisa plena que despierta en nosotros cuando escuchamos sonreír a un niño, esa vida confiada porque reside en la manos de DIOS…

AÑO NUEVO, VIDA NUEVA…. ¿no creen que es tiempo de empezar a disfrutar la vida tal cual Dios nos la dio?, empezar a disfrutar de esas cosas que no tienen precio alguno, que se nos dan gratuitamente y que en definitiva marcan la diferencia entre sentirnos vivos o sentirnos muertos, ausentes de emociones, como máquinas que solo simulan estar vivos.
El reloj ha iniciado nuevamente, 365 días nuevos!! en blanco!!; en cuyas páginas podremos continuar la historia de nuestras vidas!!, ¿cómo queremos que esta sea?.

 Lao Tse decía “La gratitud es la memoria del corazón”; ¿estamos conscientes que todo lo que experimentamos en nuestra vida (lo bueno y lo malo), hace de nosotros las personas que somos?, ¿nos sentimos agradecidos con Dios por esta magnífica experiencia que es la VIDA?....


Que Dios ilumine tu camino este 2014 para que la prisa de este mundo no te distraiga de aquello que verdaderamente te hace sentir VIVO!!.... FELIZ AÑO NUEVO!!. 

Considero que no hay mejor forma de recibir el año, que celebrando la vida que Dios nos dió, reconociendo que bonita es la vida!!, por lo que les dejo este video de Dani Martin "Que bonita la vida". Hasta la próxima.




domingo, 22 de diciembre de 2013

UNA NUEVA NAVIDAD....

Amigos, ¿cómo están?:
Miren nada más; nos encontramos a las puertas de una semana tan importante como lo es ésta en la que se celebra una nueva navidad!!!, que maravillosos momentos están por venir, la compañía de nuestros seres queridos, la cálida energía del afecto que envuelve nuestros corazones y nos hace desear todo lo mejor para nuestra vida....

Esa cálida sensación de bienestar que inunda nuestro corazón y nos hace vivir estos días en total fraternidad con quienes están junto a nosotros, ¿nos parece que todo es posible?, seguro y es que la época de la navidad esta siempre llena de buenos deseos que nacen de nuestro corazón y por que no reconocer que todos a nuestro modo todavía esperamos que suceda ese maravilloso milagro de navidad...

¿Qué esperamos de esta navidad?, todos a nuestro modo la vivimos de formas tan diferentes, como son diferentes cada una de nuestras vidas, es imposible no pensar en Dios, es él mismo quien se hace presente en cada uno de nuestros hogares, sabemos que para aquel que esta lejos de su hogar éste reside en su corazón; en los recuerdos que atesora de sus seres queridos a quienes en la distancia puede ofrecerles una oración.

Pero la navidad es en sí misma ese renacer de nuestros espíritus, es Dios quien nace para traernos todo su amor, para decirnos que no hay imposibles, que no hay enfermedades incurables, que no hay problemas sin resolver, para recordarnos desde la sencillez de un niño en aquel pesebre, que todo absolutamente todo lo que pensamos perdido alguna vez, puede volver a nosotros con solo tener fe, con solo confiar en un padre que permanentemente nos invita a confiar en él, como confiaron aquel niño y sus padres en medio de la noche en un portal de Belén.

Su llegada nos recuerda que también para nosotros brilla la luz de esa estrella en medio de la noche de nuestras vidas para indicarnos el camino; para decirnos que no hay dificultad de la cual no se pueda salir a flote solo confiando y teniendo fe, su nacimiento marca inevitablemente el renacimiento de nuestro espíritu porque es Dios mismo quien eligió hacerse hombre, uno que vivió en medio de los pobres y experimento la vida en este mundo, uno que comprende perfectamente lo que es estar solo, lo que es vivir en medio de muchas carencias, lo que es incomprensión pero así también nos demuestra que hay tesoros que son difíciles de encontrar como la amistad, el amor, para decirnos que prefirió ser pobre porque solo así pudo ser más humano....

Uno siempre se llena del espíritu de la navidad y no es por los regalos o los acostumbrados trajines de la época, tampoco lo es porque esta época siempre deja unos días de descanso; uno se llena del espíritu de la navidad porque la humanidad esta carente de amor, porque desde nuestras humildes existencias la llegada de Jesús nos sustrae de las prisas de este de este mundo, de las distracciones fútiles de este mundo, para devolver nuestros espíritus a ese elevado mundo de la fe, en el que todo es posible a la luz del amor que es la mayor magia de todas, a ese espacio en el que nuestro espíritu se recrea y por primera vez podemos escuchar lo que nuestro corazón nos dice...... TODAS LAS COSAS SON POSIBLES!!.

Vamos que todos hemos sido los peregrinos en busca de un lugar donde guarecernos; ¿nos ha faltado la fe?, mucho antes otros caminaron en medio de la noche, guiados por su fe; esa que reside en nuestros corazones y a la que hemos debido dejarla olvidada en el baúl donde residen nuestros más preciados anhelos de la infancia, en la que creíamos que todo era posible, pero la vida nos coloca muchas veces donde no nos corresponde porque hemos dejado de ver el brillo de aquella estrella que va marcando nuestro camino, probablemente porque estábamos muy ocupados atesorando tesoros, entonces cuántas veces nuestro corazón no nos habrá hecho sentir la necesidad de encontrarle en esa noche oscura, cuando más extraviados nos sentimos, cuando ya no podemos ver con los ojos del alma; pero en esa oscuridad, en esa inseguridad de no saber a dónde ir, el recuerdo de esos tres reyes magos que van marcando su propio camino y su propia búsqueda, esa humildad de reconocer que solo hay un rey que rige nuestras vidas a quien toda nuestra vida le debemos.

Son muchos los momentos de oscuridad que atravesamos en esos días del año que transcurren antes de llegar a una nueva navidad; ¿por qué nuestro corazón espera tanto su llegada?; porque fácilmente se nos olvida que ese estado mágico que impera durante los días de la navidad no es otra cosa que la vivencia clara de la Fe, esa que nos acompaña durante todo el año, a la que simplemente dejamos de ver, porque nos sumergimos en las cosas de este mundo que parece absorber lo mejor de nosotros mismos; se nos olvida que Dios ha nacido en navidad para estar junto a nosotros, su presencia no se pierde después de la navidad; él llega para compartir nuestra vida, para tomarnos de la mano cuando éste mundo nos conduce por caminos equivocados, él reside en nuestro corazón..... 

Que ésta nueva navidad sea un estado permanente en nuestra mente y en nuestro corazón y que a lo largo del año recordemos que un Rey eligió nuestras vidas más que cualquier otra riqueza en el mundo y que a la luz de su amor, TODAS LAS COSAS SON POSIBLES, en esta navidad y siempre....

Que pases la mejor de las navidades!!!!. Hasta la próxima.








domingo, 15 de diciembre de 2013

EN BUSCA DE NUEVAS ANDADURAS

Amigos, ¿cómo están?:
Semanas que anuncian el fin de año, vamos preparando nuestros corazones para celebrar la navidad y la pronta llegada de un nuevo año.
¿Cómo nos sentimos?, ¿qué balance hacemos al final de esta andadura?. A muchos de nosotros nos viene a la mente los deseos que habremos albergado en el corazón al iniciar este año, ¿cuántos de ellos hemos podido materializar?, ¿ha sido un buen año?.

Quizá para muchos fue un gran año y para muchos no lo fue; pero aquí, nos encontramos todavía batallando, todavía tratando de salir a flote de muchas situaciones adversas, de  muchas situaciones tristes que llenan de angustia nuestro corazón, y aunque probablemente nos parezca que los días, las semanas, los meses que han transcurrido han pasado inútilmente por nuestras vidas, somos personas mucho más fuertes....

Para aquellos que pasaron sus días este año habiendo visto sus deseos materializados o fueron sorprendidos alegremente con eventos que ni siquiera se imaginaban invitarles a continuar su camino manteniendo en la mente y en el corazón cada suceso feliz.

Invariablemente la vida vale la pena vivirla, en lo bueno o en lo malo; porque va marcando la historia de nuestras vidas que quedará en la mente de aquellos que nos han querido, recordando que son los momentos de dura prueba aquellos que nos llevan a los momentos felices, porque nuestro espíritu y nuestra fe necesitan ser fortalecidos al calor de aquellas duras batallas que nos dejan grandes lecciones y es que solo aquellos que saben luchar y salir adelante son quienes consiguen disfrutar de la paz que sucede después de la guerra.

Tercer domingo de adviento, ¿qué debemos esperar de él?, así como el adviento alimenta la esperanza, cada semana debemos avivar nuestros anhelos sobre lo que esperamos que Dios nos traiga o renueve en esta nueva navidad; vale la pena dejar la pesada carga de las preocupaciones y los sinsabores que nos echamos al hombro durante todo el año y esperar confiados en la fe que las cosas se renueven en nuestras vidas.

Dejar el temor de lado. Tenemos miedo de tantas cosas que perdemos la paz y el sosiego de nuestra alma con una rapidez inaudita porque no somos capaces de depositar nuestro destino en las manos de Dios, porque dudamos de nuestra fe, son muchos los días que recorremos sin poder encontrar nuestro camino, nos extraviamos cegados por el temor; pero este es un tiempo en el que debemos permitirnos esperar que todo cambie para bien, debemos permitirnos albergar la esperanza de que tiempos mejores vendrán, pero para ello debemos fortalecer nuestro espíritu en la fe.

Este tercer domingo de adviento, enciende una nueva vela y con ella la esperanza de que se fortalezca aquello que tu quieres que se reafirme en tu vida, recuerda que cada diálogo que sostienes con Dios, te pertenece solo a tí, no precisas ponerte caretas, no precisas crearte una imagen de autograndeza; ese diálogo silencioso lo escucharán solo tú y Dios...... Tercer domingo de adviento, ¿qué es lo que esperas tu?.


domingo, 8 de diciembre de 2013

¿CUAL DE ELLAS MERECES SER?

Hola Amigos, ¿cómo están?:
Vamos acercándonos a la navidad, pero con ella es imposible también dejar de pensar que se va acercando otro fin de año, ¿cómo llegaremos a un nuevo año?, ¿hemos sido capaces de vencer las dificultades?, ¿hoy somos mas fuertes?; son tantos los desafíos y los retos que encontramos a nuestro paso que es inevitable cuestionarnos si nuestro paso por este mundo, por la vida de los demás incluso la nuestra marca una gran diferencia o solo somos simples protagonistas como sombras en la pared que se limitan a su sola existencia sin hacer diferencia alguna....

A las puertas de la segunda semana de adviento, pienso en la segunda vela que encenderemos hoy o quizá ya encendieron, ¿cuál es el significado que le han puesto?, para mi el tiempo de adviento es siempre un tiempo de espera, pero sobre todo un tiempo en el que la esperanza permanece a flote pues el nacimiento de Jesús marca siempre nuevos inicios, la probabilidad de que todo aquello que uno espera se haga realidad, indudablemente este es un tiempo en el que nuestro espíritu se hace nuevo para volver a empezar.

Hace muy poco tiempo, una amistad me contó la historia de las dos ranitas y aunque probablemente sea una historia muy conocida para ustedes, reconozco que fue la primera vez que la escuché y me gusto tanto su mensaje que hoy quiero compartirla con ustedes:

Sucedió una vez que dos ranitas salieron a dar un paseo. Como hacían a menudo, recorrían los prados que rodeaban su charca saltando alegremente. Hasta que un día sucedió algo totalmente inesperado: Tras un salto ni más ni menos largo cayeron dentro de un balde que el vaquero había olvidado cerca del establo y que aún guardaba bastante leche.... por mucho que se esforzaban por salir del cubo, las paredes metálicas eran demasiado lisas y el borde quedaba demasiado alto. Y así lo único que podían hacer era nadar y nadar para no ahogarse en la leche. Pero el tiempo pasaba y el cansancio se apoderaba de ellas. ¿Te has dado cuenta de que nunca vamos a salir de aquí?, le dijo la ranita mayor a la más joven. Nuestras patitas no podrán soportarlo mucho tiempo y me temo que nunca saldremos de ésta. Moriremos aquí. No importa, respondió la otra ranita. No podemos hacer otra cosa que nadar. Nada y no te lamentes. Conserva tus fuerzas....No puedo más, volvió a quejarse la ranita mayor, De verdad te digo que ya no puedo más. Ya no siento las ancas, ya no sé si las muevo o no. No veo bien y no sé hacia dónde me muevo. Ya no sé nada. Continúa nadando, replicó la otra ranita. No importa cómo te sientas, no pienses siquiera en ello. Sigue adelante, continúa.... la ranita mayor, extenuada, abandonó y murió ahogada.... el tiempo pasaba y la ranita se sentía cada vez más débil... de pronto sucedió algo sorprendente. Bajo sus patitas empezó a notar algo de mayor consistencia que la leche, algo sólido, así que reunió las últimas fuerzas que le quedaban, se apoyó en aquella masa y saltó… justo por encima del borde del balde, para ir a parar a la seguridad del prado. Con el movimiento continuo de sus patitas la leche había empezado a convertirse en mantequilla! Y la consistencia de la mantequilla le había ofrecido un punto de apoyo desde el que saltar. Gracias a la perseverancia en su esfuerzo y a que no se había dejado derrotar por el cansancio o el sin sentido, había sido capaz de transformar una situación terrible en una ocasión de liberación.

¿Cuantas cosas hemos superado a lo largo de los días que han transcurrido para que lleguemos a este día?, ¿a cuántas personas hemos despedido aún cuando ni siquiera pensábamos hacerlo?, la vida definitivamente no es una tasa de leche, acaso todos nadamos aún sin saber cuál es la finalidad como nuestras dos ranas amigas, vemos con nuestra racionalidad humana, nos damos cuenta que la probabilidad de salir es muy pequeña si acaso en definitiva no existe... y a pesar de todo seguimos. En este momento recuerdo a un amigo quien siempre que atravesaba una situación difícil decía "estoy remando en dulce de leche" y aunque esta expresión me causaba gracia, con el tiempo aprendí a utilizarla, ¿cuántas veces no hemos sentido que estamos remando en dulce de leche?.

Pero hoy nos encontramos ante la segunda semana de adviento, ¿por qué no esperar que se renueve la esperanza en nuestros corazones?, hemos llegado a este día a pesar de todo, somos las ranas que no dejan de nadar aunque ni siquiera sepamos exactamente hacia donde nos conduce esto, lo hacemos porque una enorme fuerza sostiene nuestra vida y nuestros corazones, porque creemos en Dios y sabemos que aunque no sepamos exactamente ¿por qué nos pasa lo que nos pasa?, todo forma parte de un magistral plan de vida, que es único para cada uno de nosotros.

Estamos aquí, porque no dejamos que nuestra esperanza desaparezca, porque las dificultades y las situaciones adversas no consiguieron mellar nuestras inmensas ganas de seguir adelante. Porque tenemos el derecho de esperar que la esperanza se renueve en nuestra vida, porque no nos mueve un destino que desconocemos sino la inmensa fuerza del amor de Dios y es gracias a esa confianza que seguimos a pesar de todo.

Cuando sientas que las adversidades te superan y ya no tienes fuerzas para seguir luchando, recuerda la historia de las dos ranitas, ¿cuál de ellas mereces ser?.

Que tengas una semana preciosa, llena de buenos y alegres momentos. Hasta la próxima!!.




domingo, 1 de diciembre de 2013

EL TIEMPO DE ESPERA HA INICIADO...

Amigos, ¿cómo están?:
Bienvenido Diciembre!!!, el último mes de un año que para muchos habrá sido uno de los mejores y para otros un año que trajo consigo muchas lecciones; de una forma u otra este año ya se va; ¿cumplimos todo lo que nos propusimos?, ¡cuántas nuevas personas que estan en nuestro camino!.... cuántas que despedimos cuyo recuerdo ha pasado a formar parte de ese inmenso mar de rostros que guardamos en la mente y en el corazón... 

Hoy queridos amigos, inicia también un tiempo nuevo de espera, un nuevo adviento; a partir de hoy recorreremos cuatro semanas a la espera de la noche buena, de la llegada del niño Jesús; indudablemente este tiempo anuncia un nuevo inicio, un tiempo nuevo; una nueva oportunidad....

Este es el tiempo de espera en el cual nuestra alma aguarda vigilante en la torre de nuestras vidas, con la mirada puesta en el horizonte; ¿qué espera?, ¿qué es lo que aguarda?.

Un centinela aguarda en medio de la noche la llegada del nuevo día, permanece atento ante cualquier amenaza y aunque este tiempo para quien observa su labor puede resultar aburridor, para el vigilante es un tiempo en que todos sus sentidos están alertas, debe observarlo todo muy bien para llegar al nuevo día sano y salvo; ¿qué cuida el vigilante?.

Nuestro espíritu vigila en medio de la oscuridad de este mundo; tiene todo el derecho de esperar la luz de un nuevo día, durante este tiempo de espera lo acompañan la luz de cuatro velas; ¿qué es lo que espera nuestro espíritu vigilante?, ¿qué ilumina poco a poco nuestro camino?; acaso ¿la luz del amor, la luz de la esperanza, la luz de la fe, la luz del perdón, la luz de la salud?....

Solo tú conoces lo que tu espíritu necesita, este tiempo de espera mantiene viva la esperanza de que una nueva oportunidad se hace presente en nuestras historias, para rescatarnos de la oscuridad que ha cegado nuestra mirada; de esa soledad que a veces pesa tanto, de esa tristeza que no quiere dejarnos, de ese resentimiento que ha horadado nuestra alma.

Este es un tiempo en el que solo cada uno de nosotros sabe, lo que su espíritu espera, lo que su espíritu debe cuidar, en esas horas de oscuridad mientras espera la luz de un nuevo amanecer, solo cada uno de nosotros conoce lo que tiene de valioso en su vida y cuidarlo como el vigilante que permanece parado en la torre con la mirada puesta en el horizonte, ¿qué esperamos ver en el horizonte de nuestros caminos?....

¿Nos falta luz?, ¿es demasiada la oscuridad que ha dejado en nuestras horas un mundo que solo ofrece desasosiego?, hoy ha iniciado el camino de restauración de nuestra alma, hoy tú vigilante te has parado en la torre más alta de tu vida, cuatro velas te acompañan; sólo tú conoces lo que cada una de ellas ofrece para iluminar tu espera, HOY INICIAS UN CAMINO A LA ESPERA DE UN NUEVO AMANECER.

Que tengan una semana de mucha felicidad!!; les dejo  con un fragmento del poema "Aprenderás" de William Shakespeare y un precioso video para este época de adviento. Hasta la próxima.

Aprenderás que el tiempo no es algo que pueda volver 
hacia atrás, por lo tanto, debes cultivar tu propio 
jardín y decorar tu alma, en vez de esperar que 
alguien te traiga flores. 
Entonces y solo entonces sabrás realmente lo que 
puedes soportar; que eres fuerte y que podrás ir mucho 
mas lejos de lo que pensabas cuando creías que no se 
podía más. 
Es que realmente la vida vale cuando tienes el valor 
de ¡enfrentarla!