REFUGIO DEL ESPIRITU

Hola Amigos, ¿cómo les va?:

¡Que semana más bonita la que hemos pasado!, es importante que recuerden que nada de lo vivido ha sido en vano y que en todo lo gris siempre hay algo de luz. Así que nada más invitarles a que festejen la vida, festejen sus días, festejen y nada mas eso porque la vida tiene matices de luz y sombra y de cada uno de ellos siempre se sale una mejor persona!!.

Hoy para mí es un día particularmente especial, porque hoy se celebra Pentecostés y ¡¡cómo no lo voy a celebrar, si hoy el espíritu santo renueva los corazones y los espíritus de todos aquellos que se refugian en él!!.

Sucede mis queridos amigos, que el camino ha sido largo, que las caídas han sido duras y tan duras que el corazón difícilmente pudo seguir latiendo, aunque se siente destrozado por tantas heridas que ha sufrido. Caminar por este mundo, mientras nuestra vida transcurre en  el, es debilitar poco a poco el espíritu y sentir que el corazón ha querido tanto a las personas equivocadas que ya no le queda mucho para ofrecer, es saber que si queda todavía camino por recorrer, la fuerza se va ausentando, es saber que si no nos acercamos a la fuente de luz, a la fuente de amor que ansía nuestra alma, detendremos nuestro caminar..... 

Ha sido tan dura nuestra batalla contra el mal, que ya no sabemos si podremos seguir..... 

¡Que soldados más valientes quienes se han atrevido a enfrentarlo en un mundo entregado completamente al mal!, pero solo un soldado valiente sabe que vale pena seguir peleando, si ello significará la libertad y la llave de ese magnifico mundo oculto detrás de tantas penas, de tantas decepciones, de tantas traiciones, de tantas despedidas....

Y es que no todos los que están alrededor nuestro tienen la claridad y la fortaleza para vencer al mal, ni siquiera para luchar un segundo con el.

Pero hoy, este día en particular; los espíritus de esos soldados valientes saben que el espíritu santo, llega para reanimar sus espíritus, para fortalecerlos, para prepararlos para nuevas batallas pero también para llenar de luz esas almas que ya no distinguían la luz en un mundo gris. Esa luz que sanará poco a poco las heridas de sus corazones, esa luz que disipará toda angustia, toda amargura.

Esos soldados valientes saben que este precioso espíritu santo, es la fuente de todo consuelo, porque  en muchos momentos de la batalla sintieron que el mundo entero estaba en contra de ellos, dificultades por doquier. Han sido tantos los momentos de amargura, de desesperación.... pero este espíritu los aguarda para darles el consuelo largamente ansiado por un corazón maltrecho, por un corazón decepcionado.

La batalla ha sido tan dura que solo un soldado valiente sabe de la inmensa pena que inundo su corazón por todos aquellos que perdió durante la contienda, por todos aquellos que se dejaron confundir por el mal y contra quienes tuvo que luchar pues a pesar de ver los rostros de personas queridas, sus miradas le mostraban el odio y la ira del mal, personas amadas a quienes tuvieron que decir un adiós que partió sus corazones de dolor, pero entonces, justo cuando se creía que ya no se podía perder más; sintieron la paz en sus horas de duelo, sintieron esa paz que solo el espíritu santo que mora en cada uno de ellos es capaz de dar.

Hoy, aquellos que han sido valientes y han enfrentado duras batallas saben que como aquellos profetas recibieron al espíritu santo un día cuando sintieron que estaban solos, cuando despidieron a un amigo y no sabían a donde ir, porque ya no tenían a donde volver, aquellos profetas que sintieron miedo por ser perseguidos en un mundo no muy distinto a éste, recibieron como lenguas de fuego ese precioso espíritu santo que inundo sus corazones de amor, que les llenó de seguridad y valentía para enfrentar lo que fuera necesario, que fortaleció sus espíritus para hablar siempre con la verdad a pesar de todo peligro pues también fortaleció mucho su fe.

Les regalo cada uno de sus dones, para que puedan enfrentar las duras batallas y lleno de preciosos regalos sus espíritus para que nunca pierdan el sentido de la vida, porque solo aquellos que son capaces de ver con los ojos del alma, pueden escuchar y ver la verdad que se oculta detrás de un mundo que parece callar la vida y ocultar la belleza que Dios puso en este mundo.

Hoy es el día en que ustedes queridos amigos y yo, fortaleceremos esos espíritus cansados por tantas penalidades, sanaremos las heridas de esos corazones destrozados por haber defendido a toda costa el amor, la honestidad, la humildad, por haber llevado en alto la bandera de nuestra fe, por haber peleado una dura batalla y haber salido vivos de ella, porque nuestros espíritus están abiertos para recibir su luz, como lo hicieron un día aquellos profetas, aquellos amigos en una pequeña casa de un pequeño poblado.....

Que tangas una semana llena de alegría!!. Hasta la próxima.