domingo, 7 de febrero de 2016

Y TU, ¿COMO ESTAS?

Amigos!!!:
Bienvenidos a esta nueva semana!!!!, a este nuevo mes!!; que nuestros corazones se llenen de alegría, de esperanza, de amor pero de ese que hace que nos sintamos más vivos que nunca, de ese que nos llene de entusiasmo y que este entusiasmo sea el motor que impulse nuestros sueños.

Curiosamente esta mañana leí el título de un artículo que francamente me pareció muy curioso, el título decía lo siguiente: "Estamos muertos de éxito".
Al principio me dio gracia, se los digo sinceramente y aunque no leí el artículo me quede pensando en él, hasta que finalmente pude darle un sentido. Creo que sí, creo que estamos muertos de éxito!!.

El éxito esta sobre valorado, o en mi opinión le hemos dado una connotación mayor, no es que el éxito en sí mismo este mal, es bueno llegar a la culminación feliz de una acción o evento largamente esperado, lo que en definitiva esta mal es que hayamos cifrado nuestra vida en función al "éxito" que todo el mundo espera.

¿Se puede cifrar la vida misma en función al "éxito" adquirido?; ¿creen que la vida es realmente tan pequeña que toda ella puede caber en el significado de una sola palabra?.
Yo creo con absoluta honestidad que es más exitosa y más feliz una persona que ha sabido equilibrar muy bien el trabajo y la familia, aunque su cuenta bancaria no exhiba sumas millonarias.

Creo que es más exitosa una persona que ha llegado a conocer el amor tanto como para decir que sabe lo que es el amor y no se limita a seguir patrones descritos en algún libro, no se limita a seguir la pantomima que muchos otros representaron como si se tratara de la obra más aclamada o la más buscada.

Creo que estamos "muertos de éxito", no me cabe la menor duda; porque hemos dejado que el mundo nos convenza que vale la pena ser una persona exitosa aunque al final del día estemos carentes de todo tipo de afecto, aunque al final del día, recostemos la cabeza en la almohada y soñemos con un simple día: Mirando una puesta de sol, viendo la lluvia caer.... 

Quizá tenemos chimeneas en nuestra casa que nunca encendimos porque no tuvimos tiempo, quizá nunca hubo con quien compartir un solo minuto de afecto, quizá estamos demasiado ocupados persiguiendo un "éxito" que ni siquiera conocemos y que nunca lo haremos.

Nuestra alma, languidece mientras esperamos en vano que el corazón empiece a latir, que empiece a comunicarnos todo aquello que callo a fuerza del sacrificio de un trabajo bien remunerado que lleno el bolsillo pero nunca lleno el alma.

Decimos que somos libres y esa en definitiva es otra mentira que le hemos contado al corazón muchas veces. 
Creo que hoy no podemos ser más esclavos porque nos hemos esclavizado a todo, le hemos vendido nuestra libertad a la codicia, a la vanidad, a los vicios desenfrenados, a la inmoralidad, nos hemos hecho esclavos de la peor versión que podemos ser de nosotros mismos.

¿Cómo se puede terminar con esta esclavitud cuando nosotros mismos creemos que no lo somos?, un enfermo que no reconoce estar enfermo jamás buscará una cura para su mal, de igual forma nosotros justificamos con tantas cosas nuestra realidad: UNA HUMANIDAD ENFERMA.

"¿Por que estaría mal vender las cosas a un precio muy elevado si con ello consigo llenar mi mesa cada día?", "que tonto el que no cobra mas de lo que debe", cierto?, "las cosas hoy por hoy ya no están para tener moral, eso es cosa de tontos, aquí lo que vale es ganar plata a cualquier precio"; esa y otras mentiras han terminado por convencernos que no importa lo que se tenga que hacer, lo importante es ganar mucho dinero y no dudo que el mundo entero este a los pies de quien le ha vendido su alma al diablo y todavía se llena la boca hablando de un Dios que esta muy lejos de conocer.

Si, estamos muertos de éxito; y este mundo nos lo dice a gritos; basta ver nada más las estadísticas para saberlo pero ¿para que ver cifras?, si lo vemos en nuestros barrios, en nuestras ciudades, en nuestras propias casas.

Que curioso; hoy vemos mesas llenas y sillas vacías; después de todo ¿quién ya tiene tiempo para llegar a comer a casa?, es mejor comer algo por ahí, así nos tardamos menos en regresar al trabajo.
Hoy por hoy hay que hacer más de un sacrificio para estar junto a los hijos y conformar al "jefe" con nuestro trabajo, porque resulta que ocho horas de trabajo ya no son suficientes. Hoy vemos casas lujosas y hogares rotos; y qué decir de las iglesias llenas de corazones carentes de fe...,, si creo que estamos muertos de éxito.....

Así esta el mundo, enfermo Y TU ¿COMO ESTAS?.

Que tengas una semana llena de bendiciones!!. Hasta la próxima.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tomar un tiempo para compartir. Vuelve cuando quieras.