domingo, 7 de agosto de 2016

ARCILLA EN LAS MANOS DE DIOS

Amigos:
Bienvenidos!!, Nuevo mes, finalmente ingresamos al octavo mes del año, ya no falta mucho para que debamos despedir también este año, y espero que así como vamos cerrando capítulos de nuestra vida años tras año, lo hagamos con cada uno de los meses como páginas llenas de nuestras vivencias que invariablemente no regresaran más.
Desde esta perspectiva es bueno que abracemos el perdón no solo a quienes hayan podido producir heridas profundas en nuestros corazones, sino para con nosotros mismos por todos aquellos errores que cometimos y que dejaron huellas hondas en nuestras vidas, saber perdonar y perdonarse es el único camino que puede devolvernos la paz interior. Ha iniciado un nuevo mes, ¿qué les parece si ponemos en práctica lo dicho?.

Atravesar cada uno de los días de nuestra vida no nos exime de tener experiencias dolorosas, despedir a alguien que se quiso mucho es una de las más difíciles de enfrentar, poder salir sanos de cada uno de estos momentos es más que una responsabilidad, un deber que tenemos para con nosotros mismos, sin embargo las más de las veces orillados por la situación somos presas de la desesperación y por consiguiente de la frustración, la tristeza y la sensación de abandono por parte de Dios no tardan en hacerse presente; si pudiéramos resumir todo en una sola frase sería: Sufrimos por nuestra falta de fe.

Escuchar que alguien nos diga eso, en momentos difíciles de nuestra vida, más aún si a cada momento musitamos oraciones hilvanadas una después de la otra; hace que realmente sintamos rabia, para con los demás, para con nosotros, para con Dios mismo.

Si, definitivamente estamos sufriendo, y aunque hemos estado rezando no vemos la respuesta de Dios, por lo menos no la que estamos esperando; pero se nos olvida que cada uno de nosotros somos arcilla en las manos de Dios, que hay momentos de nuestras vidas en los que aquello que pedimos coincide con la voluntad de Dios y otros en los que probablemente no podamos hacer nada mas que dejarnos guiar por su mano  hasta donde su voluntad nos lleve.

Ningún camino es completamente ausente de sufrimiento y ningún camino esta ausente de alegrías; lo que sucede con frecuencia es que oscilamos entre los dos extremos.
No es raro que nos convirtamos en presos de la desesperación cuando nuestras oraciones no tienen la respuesta esperada y es probablemente esa desesperación la que no nos permite escuchar lo que Dios nos esta diciendo, a veces solo debemos esperar y estar muy atentos para que esos momentos en los que el alma parece haberse adentrado en la oscuridad terminen por dar paso a la luz.

Solo somos arcilla en las manos del Señor, a veces jugamos a ser dueños de nuestro destino y éste esta depositado en las manos de Dios, poder aceptar esto en nuestras vidas podría significar la diferencia entre un espíritu sano de otro que esta enfermo, pues la constante "lucha" es lo que nos lleva a contaminar nuestro espíritu con rencor, con reproches, con tristeza, con frustración al punto de hacernos sentir lo seres humanos más inútiles, incapaces de controlarlo todo.

Si, evidentemente nunca podremos controlar lo que pase cada día, pero sí que podemos controlar lo que pasa con nosotros, la forma en la que enfrentamos aquello que desconocemos y la manera en que reconocemos que hay momentos en los que lo único que podemos hacer en sentarnos y dejar que Dios moldee nuestros espíritus de tal forma que podamos salir de cada situación adversa completamente sanos.

¿Podemos hacer algo?, si que podemos; aunque muchas veces esto signifique que no podemos cambiar nada, tal vez lo único que podemos hacer es dejarnos llevar por la marea alta durante la tormenta, pero invariablemente no vamos solos, pues Dios va junto a nosotros. Que podamos ver que esto es así, dependerá únicamente de la calma y la paz que tenemos como fruto de la aceptación de su voluntad y la seguridad de que será él mismo quien remedie toda situación pues solo somos arcilla en las manos de Dios.

Que este mes sea tan dichoso como sea posible!!!. Hasta la próxima.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tomar un tiempo para compartir. Vuelve cuando quieras.