domingo, 18 de noviembre de 2018

"GRACIAS"

Esta semana tome consciencia de todas las formas en las que Dios bendice mi vida, creo que lo hacía desde hace tiempo, pasa que cuando tu recibes algo inesperado que llena de alegría tu corazón es inevitable no pensar en Dios y decirle "GRACIAS", y en mi opinión esto debe suceder más veces de la que somos conscientes, entonces ¿por qué no alimentamos la alegría y la confianza? sencillamente porque queremos ver cosas, eventos o regalos "verdaderamente" significativos.

¿Qué pasa si un día te duermes pensando que sería muy lindo si el siguiente día fuera un día lluvioso y cuando despiertas ves que evidentemente te recibe un día tan lluvioso como lo pensaste?, ¿qué es lo primero que pasa por tu mente?, seguramente piensas que se trata de una coincidencia y disfrutas ese día; ¿piensas por un segundo que Dios esta tan atento a ti que ese día decidió regalarte un día lluvioso?, son muy pocas las personas que prestan atención a esos "pequeños" enormes detalles que suceden en la vida de cada uno que marca la diferencia entre la rutina y la dicha de un evento inesperado pero feliz.

En estos días he sentido gratitud incluso por aquellas personas que comparten conmigo algún mensaje que les gusto y tocó de forma favorable su corazón, porque me dan la oportunidad de pensar en aquello que probablemente no tenía en cuenta, me regalan un tiempo feliz porque mucho de lo que comparten también toca mi vida de alguna forma, siento gratitud por estas personas porque pensaron en mi para compartir algo bueno, en un mundo donde ya casi nadie hace nada si no recibe algo a cambio, estas personas simplemente pensaron en mí para compartir algo favorable y eso sí que merece mi gratitud.

Son nuestras "elevadas" formas de ver y vivir la vida, las que nos llevan a vivir en la frustración, el desaliento y el inconformismo, cuando en en realidad la vida de cada uno de nosotros esta llena de bendiciones!!!.

"Tenemos dos vidas. La verdadera es la que soñamos en la infancia. La que continuamos soñando adultos en un sustrato de niebla. La falsa es la que vivimos en convivencia con los demás. La falsa es la práctica y útil. En la otra, y no en ésta, vivimos".
(Fernando Pessoa)

Desde que he sido consciente de esto me acerco a Dios con más gratitud que necesidad, lo que trato de decir es que por lo general tenemos la mala costumbre de pensar en Dios, como un dador de cosas, así que nuestras oraciones y nuestros espacios de dialogo con él se resumen a pedir aquello que pensamos necesitar, como conclusión ese espacio de oración que debería confortar nuestra alma, nos deja mucho más acongojados y preocupados.

Tenía un conocido que me decía que cambiaba el orden de todos los muebles de su habitación al menos una vez por semana porque así creía que removía las energías de su entorno, recuerdo que me aconsejaba hacer lo mismo "¿Cómo van a llegar cosas nuevas si ni siquiera somos capaces de poner un nuevo orden en nuestros muebles?", bueno; en este caso sí que voy a tomar en cuenta su consejo, pero desde mi propia perspectiva y es que desde hace algún tiempo que vengo diciéndote que la vida en buena medida se trata de sumar, de sumar todo (momentos felices, palabras de afecto, etc.) en definitiva sumar todo lo bueno, todo lo que nos hace felices, y creo que la gratitud no debería quedar fuera de ello.

Así que te invito a que empieces a contar más tus bendiciones, que empieces a alimentar más la gratitud por todo aquello que recibes o que te hace feliz. Creo que al menos un tipo de magia si existe, una que aún no sabemos cómo manejar pero que tiene la facultad de transformar nuestra vida en formas que ni siquiera podemos imaginar, como bien decía el escritor Arthur C. Clark:

"La magia es solo ciencia que aún no entendemos"

¿Te animas a intentarlo?



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