EL MEJOR REGALO

Ha comenzado el adviento, no hay mejor tiempo para empezar a preparar el corazón para las fiestas que se avecinan, para cerrar viejas heridas, para reparar relaciones dañadas, para albergar paz pero por encima de todo para valorar.

Las personas valoramos muchas cosas, con tristeza hay que reconocer que a veces se valoran más las cosas materiales, y desafortunadamente las celebraciones de fin de año han sido opacadas por ello; pero este mes, el último del año, este tiempo de adviento, las celebraciones de fin de año te invito a que te reencuentres con lo que realmente es valioso a lo largo de tu existencia.

A veces nos toca comprender las lecciones que la vida nos trae con tristeza, pero hay que saber reconocer lo que debemos aprender aunque el corazón este compungido. 

Este año como cada año me reuniré con mi familia para celebrar las fiestas de fin de año, pero esta vez habrá una silla vacía en la mesa, he estado pensando en esa "silla vacía" mas de lo que me gustaría reconocer, y ha sido esto precisamente lo que me ha llevado a reafirmar con mucha más convicción que la vida debe ser una celebración en todo tiempo y mucho más en estas celebraciones porque el verdadero regalo, no es el que se encuentran a los pies del árbol de navidad: El verdadero regalo es la presencia de aquellos que amamos, son sus miradas de amor, son sus abrazos cálidos la noche buena, son sus deseos de felicidad.... También tu presencia es un regalo para los que te aman y te han regalado un lugar en sus corazones, creo que es importante pasar este tiempo recordando que no será una cena más de navidad o de año nuevo.

Tenemos nuestra mirada en tantas cosas, los regalos, los adornos, los árboles de navidad, la decoración de la casa, abrir espacios en nuestra agenda para esos días "con la familia" pero no es hasta que una de las personas que amamos ya no esta, que realmente somos conscientes del enorme regalo que Dios había puesto en nuestra vida.

Ha iniciado el adviento y mi invitación es que mires a las personas que están contigo y albergues en tu corazón una enorme gratitud, porque todavía están.

Si tú, estas como yo, con el recuerdo de esa persona ausente que esta navidad ya no cenará contigo, esa persona a la cual ya no abrazarás a media noche ni le desearas felicidad, te invito a que celebres la vida de aquellos que sí estarán junto a tí, que no dejes de celebrar la vida, porque quienes te aman también merecen que les regales la dicha de verte feliz. Te invito a que a pesar de todo, también albergues gratitud en tu corazón, porque Dios puso en tu vida muchos regalos más que te miran con amor, que están junto a tí probablemente brindándote una palabra de aliento o solo regalándote una enorme sonrisa.

Este tiempo es el mejor para reconocer que Dios es bueno y maravilloso y que si llenó nuestros días de felicidad en el pasado también lo esta haciendo hoy y lo hará el día de mañana, es el mejor tiempo para dejar que sanen las heridas del alma con su amor y para agradecerle la maravillosa esperanza que nos da la bienvenida con cada nuevo día para poder enmendar nuestros errores pero sobre todo, para agradecerle por nuestra vida y la vida de aquellos que amamos.....

Que no sea un diciembre mas, un adviento mas, una cena de navidad con la familia más; que este sea el mejor diciembre, el mejor adviento, la mejor cena de navidad con la familia que tendrás y tendrán aquellos que amas!!!.