LOS TIEMPOS DE DIOS SON PERFECTOS

Esta semana esta planificado que dé una conferencia sobre gestión del tiempo, siempre me proponen temas nuevos, me quedo fascinada con la inagotable capacidad de Dios de crear días nuevos, nuevas experiencias que acompañan a a ese pasar con el tiempo, porque pasamos y no creo que estemos muy conscientes de ello.

Hace unos días me dí cuenta una vez más que no es aleatorio, ni es cosa del azar o del destino que determinadas personas estén cerca de nosotros, esto obedece al simple hecho de que cada una tiene un rol en tu vida, como posiblemente tu tengas el propio en las suyas. Después de todo no nos movemos como hojas al viento, sin rumbo y sin sentido.

¿Te has planteado alguna vez pensar que todo es posible?, es precisamente la ocurrencia de las cosas imposibles lo que hace que el alma se expanda en el verdadero sentido para la cual fue creada, pues el alma no conoce de finales, el alma realmente no muere, nos lo dicen incluso en la religión; a la luz de esta magnífica posibilidad surge otro tema no menos importante, el alma conoce también un lenguaje que trasciende fronteras, para ese tipo de lenguaje no existe el tiempo, no existe la distancia.

Si tú conoces personas a las cuales te sientes estrechamente unido, considera al menos la posibilidad de que es muy posible que ellas tengan algo que enseñarte o tu tengas que hacerlo, no es casualidad que las "presentes" en tu vida, la cercanía no debe quitarte la posibilidad de ver que muy posiblemente existan otras lejos de ti que estén enriqueciendo tu alma de igual manera.

A la mayoría de las personas no nos gustan las despedidas, pero si tan solo fuéramos capaces de trascender la amarga experiencia de pérdida, podríamos ver que en suma, las despedidas no existen, que el alma se sigue comunicando en más de una manera.

Hace algún tiempo me reuní con una amistad a la que  no veía hace mucho tiempo, esta persona me relataba que le había costado mucho vencer el miedo los primeros días que empezó a manejar su movilidad, pero recordó con alegría que una de sus hermanas que vive en otro país y a la cual se siente profundamente cercana, regresó a su país en esos días, fue esta hermana la que le infundió la confianza que necesitaba para empezar a practicar y manejar su auto hasta que finalmente manejó con absoluta confianza, al final su hermana se fue pero estuvo presente cuando esta persona más lo preciso.

Los lazos del amor son así, y los tiempos de Dios son exactos; tenemos a nuestra disposición una increíble gama de posibilidades que hacen que lo imposible a los ojos humanos, sea completamente posible a los ojos del alma, solo nos hace falta algo que hemos olvidado: CREER.

No trataré este tema en la conferencia que dictaré esta semana, pero consideré que sería bueno para tí, si es que no lo haces ya, recordar que debes valorar más a las personas que se cruzan en tu camino de una forma u otra y con las cuales has establecido un nexo difícilmente explicado en palabra que sin embargo posee una unión muy fuerte en tu alma.

No es la vida que pasa a diario por nuestros ojos y que ocupa tanto nuestra mente la que llamamos vida, es aquella que sucede en el alma, que vemos con los ojos del alma y nos comunican un millón de posibilidades, la que nos acerca a esa personas que indudablemente enriquecerán nuestras experiencias aunque no las tengamos a nuestro lado.

Me gustaría pensar que comprendes lo que acabo de escribir, pero si caso aún no es sencillo para tí, recuerda que los tiempos de Dios son perfectos.