Ayer por la mañana, cuando salí de casa, mi corazón se expandió
gratamente, ni bien salir de ella, tenía la posibilidad de dirigirme a mi
destino en automóvil pero realmente elegí caminar, es algo que trato de elegir
siempre que puedo pues es una actividad que realmente disfruto, al caminar no
solo tengo la posibilidad de aclarar mis pensamientos, también trato de
observar los "escenarios" que van cambiando conforme avanzo, esos
"escenarios" que mencioné líneas arriba se traducen en el magnífico
paisaje que Dios nos regala todos los días, personalmente lo considero así.
La mañana de ayer, era particularmente preciosa; había llovido la noche
anterior y el sol peleaba por salir de un conglomerado de nubes entre grises y
blancas, esos pequeños pero poderoso rayos de sol iluminaban de una forma tan
particular los árboles que fue inevitable para mi pensar que estaba
contemplando una vista magnífica de la vida, sentí un gran bienestar en mi alma
y pensé una vez más que cuando llegue el último día, realmente extrañare sentir
la vida de esa modo inesperado pero feliz.
A estas alturas, ya te habrás dado cuenta que soy de las personas a las
que realmente le gusta observar muy bien todo, las miradas, las palabras y las
actitudes de las personas, ¡cuántas verdades descubres en ellas! y sin embargo
siempre me quedó sin comprender ¿por qué las personas siempre admiran algo de
otras cuando cada uno tiene algo magnífico por sí solo?.
Comencé escribiendo sobre una parte de la vida y lo bella que es pero
las personas también muestran una parte de esa belleza infinita de la vida,
cada una de ellas son creaciones tan auténticas, tan únicas que resulta
realmente un placer observar la vida cuando una sola de ellas esta haciendo
aquello para lo cual ha nacido. La habilidad con la que una sola persona lleva
adelante sus tareas, son un espectáculo verdaderamente maravilloso, quizá sea
por eso que uno se quede pensando: "Cómo me gustaría poder hacer algo tan
hermoso".
Pensarlo esta bien, porque nos impulsa a exigirnos, pero tratar de hacer
lo mismo es una tarea además de agotadora, verdaderamente injusta con uno
mismo, porque invertir todo tu esfuerzo en tratar de hacer lo que hace otra
persona, es negar aquello que tú haces con mucha facilidad y sin embargo
refleja ante los demás una maestría increíble.
He pensado mucho al respecto y he llegado a la conclusión de que
probablemente no sientes que sea algo espectacular porque no sientes que estés
haciendo un gran esfuerzo, pero tal es la forma en la cual has sido creado, esa
es la maravilla de tu existencia, que puedas desarrollar aquello que te hace
feliz con absoluta sencillez, sin toda la presión o el estrés al que las
personas se sumergen a menudo en el mundo.
Es bueno admirar una cosa o la otra porque eso significa que estamos
vivos, que aún conservamos la posibilidad de sorprendernos con las cosas
maravillosamente sencillas que encontramos a nuestro paso. Lo que en realidad
es tóxico para tí es que pienses que tú no haces nada con tal valor, que midas
tus logros en función a los logros de alguien más o que trates de escalar
"alto" porque crees que necesitas "algo más" para
sobresalir.
Quisiera que disfrutes más tu tiempo, que seas consciente de todas las
cosas que se te presentan para que aprendas de cada una de ellas y que
disfrutes de todo aquello que llega para que atesores momentos felices;
quisiera que comprendas que las preocupaciones no harán que las cosas se
arreglen más rápido y que tengas la suficiente seguridad para saber que tienes
todo lo que necesitas para resolver cualquier situación, que sí sientes que
solo estas viendo pasar el tiempo y aquello que ocupa tu mente sigue sin
resolverse, empieces a considerar que probablemente sea momento de emprender
otro camino, quisiera que no te preocupen los años que ya han pasado más bien
que entiendas que aún hay tiempo para emprender nuevos rumbos.
Muchas vidas se han perdido porque se siguieron caminos equivocados,
espero que tú tengas la capacidad suficiente para ver las increíbles
habilidades que tienes para seguir tu camino y el valor para construir tu
propia felicidad.
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