He estado pensando que cada nueva experiencia nos enriquece en maneras que nosotros ni siquiera podemos imaginar, quizá no podemos advertir esto porque nuestros cambios son paulatinos.
Sobre la vida se dice mucho y de hecho se ha escrito mucho, también yo a mi paso trato de reflejar aquello que voy aprendiendo y ciertamente la vida me ha ocupado muchas horas de observación, reflexión y aprendizaje, a pesar de ello continúo aprendiendo muchas más cosas al punto que he llegado a darle un verdadero significado a la frase: "uno nunca deja de aprender, ni siquiera en la muerte".
Hace algunos días he tenido que interrumpir mis actividades, porque he tenido que asistir a un evento, que jamás planifique, pero al que tenía que ir de forma obligatoria. Este evento ha ocupado toda una jornada completa de mi día, sin embargo; a pesar de que al final del día el cansancio se hacía presente, disfrute la actividad gracias a la maravillosa interacción con las personas. De nuevo llegué a la conclusión de que uno no controla lo que va a pasar pero sí que puede elegir cómo reaccionar ante ello.
Quizá uno se pierde mucho por andar de prisa, pero cuando se tiene el tiempo para reparar en las personas, indistintamente si las conoces muy bien o no; siempre vas a tener la oportunidad de enriquecerte con sus historias, pero no aquellas que se cuentan con palabras, me refiero a esas que se cuentan con la mirada. Eso fue precisamente lo que descubrí ese día. Tuve la oportunidad de ver personas cansadas quizá de la vida, pude ver personas que me hablaban con un brillo de esperanza en su mirada y que consiguieron transmitirme lo mismo!!. Comprendí que las personas a veces jugamos a disfrazarnos, pero una sola mirada basta para delatarnos.
La segunda cosa que aprendí ese día, es que la aparente "normalidad" de nuestros días, es un tesoro raramente apreciado. A veces pasamos nuestros días sumergidos en una "rutina" que por momentos nos parece agotadora, pero cuando la perdemos, vemos con claridad que la NORMALIDAD es en sí misma un regalo. Somos más ricos de lo que realmente pensamos!!.
Ahora, déjame decirte que "esa normalidad" no tiene nada de normal. ¿Te parece una contradicción?, a primeras luces para ser así; pero, pensando un poco más en ello creo que en nuestra vida, en cada uno de sus días aparecen un cúmulo de detalles que pasamos por alto y que sin lugar a dudas hacen de "ese día" algo único por vivir, puedes darte cuenta de ello o no; pero a la postre son esas "pequeñas" cosas que pasan las que alimentan el alma y nos hacen sentir vivos, nos reportan una ilusión enorme.
Deja que tu vida se enriquezca con sus propias vivencias, ellas son más valiosas de lo que tú piensas!!. Que tu mirada cuente la maravillosa vida que has tenido y que tienes, porque es así; puede que en este mismo momento seas la personas más afortunada y ni siquiera lo has advertido, ¿no te parece que ya es tiempo de ver con absoluta claridad la vida y empezar a vivir?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tomar un tiempo para compartir. Vuelve cuando quieras.