domingo, 13 de diciembre de 2015

EL CAMINO HACIA LO VERDADERAMENTE IMPORTANTE

Amigos, Benvenidos!!!
¿Cómo los recibe el tercer domingo de adviento?, si; parece que una vez más que el tiempo vuela, tan pronto estamos en el tercer domingo de adviento, el tiempo se nos esta pasando tan de prisa que no podemos desperdiciarlo.
Cuando hablamos en términos empresariales o industriales; consideramos muchos aspectos prioritarios dentro de la empresa; buscamos hacer el mejor uso de los insumos, materias primas o como quiera llamarse para poder conseguir el máximo beneficio de los mismos pues bien, el tiempo debería ser para nosotros uno de los recursos más importantes sino el más importante.

Hoy el hombre ha agotado este recurso, invirtiéndolo en un sinnúmero de actividades que han conseguido llenar sus días pero lejos están de llenar sus vidas. Lo cierto es que nos hemos sumergido en una carrera loca, ¿hacia dónde?, creo que difícilmente podemos contestar esta pregunta realmente, pero vaya que pasan muchas cosas por la mente (buscamos un buen trabajo y por bueno me refiero a bien remunerado, buscamos la pareja perfecta y por perfecto me refiero a la más bella o al mas guapo, al que tenga más dinero; buscamos la casa o el departamento más suntuoso que este en la mejor zona, el auto o el celular último modelo) tantas cosas, pero realmente ¿hacia donde corremos?...

"No tengo tiempo", ¿a cuántas personas hemos escuchado decir esto?, ¿cuántas veces hemos dicho esto?, parece que el tiempo se agota, 24 horas ya no son suficientes, porque es más fácil anestesiar la mente, anestesiar el alma para no ver en lo que hemos convertido la vida.
Pensamos en todo lo que nos hace falta, ¿con cuántos fantasmas hemos hablado ya?; no tenemos tiempo para mantener relaciones duraderas, no tenemos tiempo para ver que ya tenemos todo lo que necesitamos, no tenemos tiempo para disfrutar de todo lo que tenemos porque estamos demasiado ocupados en buscar lo que creemos necesitar.

Estamos en pleno adviento, tercer domingo; ya falta poco; con seguridad por nuestra mente ya están pasando todos los regalos y las personas a las que se los queremos dar; gastamos fortunas en ello y es que para que uno trabaja tanto si no es para poder darse un un gusto verdad?.
Sin embargo, que bueno es; por lo menos durante este tiempo; ponerse en los zapatos de los demás, si tan solo pudiéramos ver lo que los demás esperan de nosotros nos daríamos cuenta que disponemos de tanto para dar, lo material no define lo importante.

Con tristeza hay que reconocer que muchos nos hemos preguntado ¿cuánto cuesta el tiempo de las personas?, porque de pronto ya no se puede hablar, ya no se puede disfrutar de las cosas más pequeñas, regalar nuestro tiempo alguna vez sería diferente; entonces veríamos que hay mucho, muchísimo que podemos disfrutar, hemos cifrado la vida con tanto materialismo que ya no somos capaces de rescatarnos de esa oscuridad que ha cubierto los ojos del alma.

Esta época tiene un cierto brillo, lleno de magia que nos regala la oportunidad de rodearnos de esa luz, aunque sea un poquito. Solo precisamos un poco de ese "preciado" tiempo para dejar de pedir y empezar a agradecer por tanto!!!

Que esta semana, tu corazón te muestre el camino hacia lo verdaderamente importante!!. Hasta la próxima!!!.



domingo, 6 de diciembre de 2015

RECONCILIARNOS CON LA VIDA!!!

Amigos, Bienvenidos!!!:
Ingresamos a la segunda semana de adviento, que aventura para el espíritu!!!; para aquellos que nos regalamos unos minutos al día para dedicárselos al espíritu esta es una aventura como muy pocas, pues nos lleva a prepararnos para la gran celebración como lo es el nacimiento de Jesús.
Creo que muy pocas celebraciones en el año nos sumergen en tal ambiente festivo que sin buscarlo siquiera el alma inicia su propia travesía.

Sé que muchas veces a lo largo no solo de este año quizá mucho tiempo atrás aún; sentimos que caminamos a ciegas, que los proyectos que emprendemos fracasan, en muchos de ellos imprimimos tanto esfuerzo que la desilusión es muy grande; los sueños que albergamos no llegan nunca y muchas oraciones se perdieron en el mar de la desesperanza.

A veces la soledad que sentimos es tan grande a pesar de estar rodeados por mucha gente, esa soledad que deja un gran vacío en el alma, esta sociedad egoísta ha llevado a muchas personas a encerrarse en sí mismos, ¿a dónde se van los deseos de tener una buena conversación, de compartir un café, de compartir un paseo?. A veces vemos a las personas tan sumidas en sus "propias vidas" al punto que ni siquiera son capaces de ayudar a quien tienen a su lado.

Cuando pienso en las personas que viven de este modo es inevitable que recuerde al hombre que dedicaba su tiempo a calcular en el libro del principito. Con tristeza debo reconocer que hay muchas personas que han dejado que sus vidas se consuman tras el opaco brillo del "dinero".

Podríamos pasar mucho tiempo relatando todas las formas por medio de las cuales las personas han dejado que se roben sus vidas; al punto que ya ni siquiera son capaces de reconocer el amor o la belleza de la naturaleza que todavía vive en este mundo.
Estamos a solo un par de semanas de celebrar la navidad y no puedo dejar de pensar en ese personaje triste de ese clásico de Charles Dickens (A Christmas Carol o Un cuento de Navidad), el Señor Scrooge que dejó que su corazón se enfriara por completo debido a las duras experiencias de su vida y en buena medida a la codicia con la que llenó su corazón, puede ser un cuento de niños sin embargo hoy en día existen  muchos señores scrooge.

¿A qué viene todo esto?, a que el espíritu puede demostrar y de hecho lo hace; una fortaleza inquebrantable, pero así de fuerte como así de frágil puede ser; son muchas las pruebas y demasiados los sinsabores con los cuales debemos existir; hace algunos párrafos me referí a las muchas oraciones que se pierden, que se desvanecen en el tiempo para las cuales nunca tuvimos ninguna respuesta.
Desafortunadamente son precisamente aquellas que hilamos al calor de la angustia o la desesperación que reflejaban una inmensa necesidad las que nunca tuvieron respuesta alguna....

Si, es innegable que cuanto más precisamos es cuento más solos nos sentimos; en esta segunda semana de adviento y dado que estamos en pleno tiempo de preparar nuestro espíritu; tengo la intención de recuperar un poquito de esos espíritus que se diluyeron en las tempestuosas aguas de la tristeza, de la decepción, de la incredulidad.

Es posible que durante esas largas horas en que tocaron la puerta y nadie les abrió, durante esas horas de soledad cuya única compañía fueron muchas lágrimas, durante esos tiempos de oración que dejaron un gran vacío en el alma, nos les fue posible darse cuenta que Dios estaba más cerca de lo que pidieron, no pudieron darse cuenta que él obraba a su propio modo para que pudieran enfrentar un día después del otro.

¿Por qué no nos fue posible darnos cuenta? para responder esto, preciso recordarles el momento en que Jesús agonizaba en la cruz, las palabras que emitió en esos momentos de dolor vienen a mi mente cuando atravieso tiempos de dificultad.... "Señor, Señor; ¿por qué me has abandonado?". Somos tan humanos como lo fué Jesús en esas largas horas de dolor físico, cuanto mayor fué la agonía espiritual; y es precisamente debido  a esa condición en la que el alma se encuentra tan herida, tan lastimada que no sentimos, que no percibimos que Dios esta a nuestro lado.

Cuando nos hacemos una herida profunda, sentimos tanto dolor que somos incapaces de darnos cuenta que el cuerpo ha empezado a sanarla aún cuando no hemos hecho nada para que esto suceda; es tanto el dolor que no percibimos que la herida a empezado a sanar.
Exactamente eso es lo que sucede con el alma, solo que las cicatrices que permanecen en el espíritu cuando hemos librado largas horas de dolor; nos hacen pensar que fuimos capaces de salir solos de eso. Nuestra razón termina por convencernos de que esto es así, pero nada esta más lejos de la realidad, pues así como Jesús se reencontró con su padre al morir a esta vida terrena, como lo haremos cada uno de nosotros en su momento; así esas heridas en el alma nos hablan de su presencia...

La pregunta de Jesús en la cruz, no es otra cosa más que una forma diferente de creer desde el dolor; pues en ese momento no niega, ni se decepciona, ni se entrega a la muerte falto de fe; mas por el contrario esas palabras no es otra cosa más que el reflejo de su propia fe, de una flaqueza producida por el dolor mas no de una negación, esas palabras nos hablan de un reconocer su presencia y de la incapacidad de poder advertirla.
Ningún ser humano habría sido capaz de soportar lo que Jesús soporto, Dios estuvo en todo momento con él, brindándole su fuerza y su gracia, las embestidas de quienes obran en mal suelen ser muy duras, pero eso no significa que Dios no este presente.

¿Quién desde la insignificancia de su existencia no se ha sentido así alguna vez?, este es el tiempo para dejar que el alma se despoje de esas cicatrices, es el tiempo de ver con claridad que nunca estuvimos solos, que llegamos a este tiempo gracias a que Dios nos dió la fuerza para soportar ese "trago amargo", que Dios nos regalo risas nuevas, días nuevos, que Dios nos puso donde estamos hoy.

Ya ha pasado mucho tiempo aferrándonos a un dolor que ya no existe más que en nuestra propia mente, llevamos mucho tiempo con el corazón endurecido, estos días tratemos de soltar ese peso, de romper esa dura coraza con la que creímos proteger nuestro corazón, es tiempo de reconciliarnos con la vida, con nuestra vida!!!.

Que esta semana tengas la claridad suficiente para poder ver que Dios estuvo y esta contigo. Hasta la próxima!!!.


domingo, 29 de noviembre de 2015

ES TIEMPO DE ACORTAR DISTANCIAS!!

Amigos, Bienvenidos!!!:
Hoy los recibo con una inmensa alegría en el corazón pues Dios nos ha permitido celebrar una vez mas el maravilloso adviento, que es el tiempo en el que preparamos nuestro espíritu para celebrar la navidad.
Como ustedes ya lo deben saber durante el adviento buscamos cuatro aspectos de nuestra vida sobre los cuales nos gustaría reflexionar para seguir adelante con el alma renovada.
Teniendo esto en mente esta semana elegí hablar sobre la relación que llevamos con aquellos que comparten espacios de nuestras vidas llámese trabajo, amistad o familia.

¿Por qué es tan importante hablar de esto?, porque indudablemente será lo que hable de nosotros cuando ya no estemos. La vida es demasiado corta (cuando estaba escribiendo esto pensé que es corta para quienes saben vivirla), pero definitivamente creo que es demasiado corta aún si no sabemos cómo "vivir", aún si nos pasamos la vida viendo solo días grises; en este último caso claro esta la vida se convierte en una especie de agonía de la cual no sabemos cómo salir.

De un modo u otro, la única certeza que esta vida nos da es que un día terminará; no sabemos cuando, lo que si sabemos es que Dios puso en nuestras manos un tiempo determinado, que debemos administrar entre aciertos y desaciertos; así se nos pasan nuestros días.
En medio de esos aciertos y desaciertos conocemos muchas personas; algunas consiguen ganarse un sitio en el corazón, otras dejan buenos recuerdos y otras definitivamente nos dejan grandes lecciones.

Lo cierto es que con el tiempo comprendí que sea que algunos pertenezcan a un grupo o al otro; las personas también salen de nuestras vidas; cerramos ciclos como lo hacemos con todo, cambiamos de casa, de trabajo, de país, etc.
Nuestras existencias no quedan exentas de esa extraña forma en la que transcurre la vida; nosotros también formamos parte de la vida de muchas personas y a su tiempo vamos saliendo de cada una de ellas, de ahí que la frase "nada es para siempre" explica muy bien lo que les digo, solo Dios es para siempre como bien termina mi libro "Para Siempre".

En ese interín de pasar y ver pasar, vamos estableciendo distintas relaciones (de amistad, de amor, de trabajo) algunas más complejas que otras.
El ser humano tiene la extraña particularidad de desgastar relaciones, de sumergirse en discusiones pequeñas que luego se convierten en abismos grandes, quizá en buena  medida porque el ser humano no sabe (en su gran mayoría) amar, ¿será que eso es solo cosa de Dios y de los animales?.

El tiempo se nos pasa entre querer conservar relaciones que ya llegaron a su fin, y esto no precisamente quiere decir que no haya existido amor, solo que un ciclo se cerró; pero todos tenemos algo de dramáticos y nos lanzamos a la inútil tarea de aferrarnos a algo que ya se acabo; por lo menos del modo al que nosotros estábamos acostumbrados; a veces ese "fin" solo encierra una transformación pero el corazón es muy pequeño para comprenderlo.

¿Qué es lo que pasa entonces?, que las personas empiezan a lastimarse a tal punto que ganan más los malos recuerdos. El corazón resulta tan herido que se hace difícil recordar ¿por qué creímos que amábamos a esta persona?, hasta que el tiempo trae el olvido y éste nos recuerda ¿por qué los amábamos? pero ha sido tanto el esfuerzo que pusimos en mantener a esa persona en nuestra vida que para cuando llega el sosiego a veces es demasiado tarde e irremediablemente esta persona no solo se ha ido físicamente, su corazón también se alejo del nuestro.
Qué decir de discusiones cuyas bases son el egoísmo, la ambición, etc. que termina por traicionar a quienes más se ama, entonces el abismo entre esos corazones es más grande.....

Hoy hemos iniciado el adviento; sería muy bonito que reduzcan esa distancia entre aquellos que amaron una vez; no porque vayan a lanzarse a la tarea de intentar que vuelva, más bien porque es tiempo de perdonar, de sanar heridas, de restablecer relaciones que creímos un día "importantes".

Lo importante no es que las personas se queden siempre junto a nosotros; tampoco lo es que no vayamos a irnos nunca, lo verdaderamente importante es que cuando lo hagamos dejemos tras nuestras huellas un largo camino de relaciones sanas basadas en el amor, en la tolerancia, en la libertad, en el respeto y en la comprensión; mirando el futuro con la madurez que nuestro espíritu, que ha librado duras batallas y ha aprendido grandes lecciones, puede darnos. Que no sea un mal momento el que de testimonio de nuestros paso por esta vida.... ES TIEMPO DE ACORTAR DISTANCIAS!!.

Que tengas una semana llena de bendiciones!!!. Hasta la próxima.








domingo, 22 de noviembre de 2015

LA PERSONA QUE DIOS SOÑO QUE SERIAS

Amigos, Bienvenidos!!!:
¿Cómo les va?, espero que esta semana que acaba hayan tenido gratos momentos, que les haya dejado felices recuerdos pero sobre todo que sus corazones no hayan dejado de esperar cosas maravillosas y menos en este tiempo que se aproxima pues estamos a las puertas de vivir un nuevo tiempo de adviento.

Preparando una charla en días pasados, pensaba sobre la Fe y cómo la vemos y la vivimos nosotros; consultando libros con la finalidad de prepararme para la charla que tenía en puertas; me di cuenta que evidentemente muchos de nosotros buscamos a Dios por muchas razones, tantas como distintos son los requerimientos que tenemos pero ¿cuántos buscamos a Dios con la finalidad de invitarlo a que forme parte de nuestras vidas?.

Creo sinceramente que hemos confundido lo que es la FE, pero sobre todo hemos distorsionado la idea que tenemos de Dios; cada uno (al menos creo en su mayoría) ve a Dios y se acerca a él para pedirle que nos ayude con algo determinado, o que ayude a una persona con una necesidad en particular, lo que en definitiva no esta mal pues para Dios nada es imposible pero las personas en su gran mayoría han llegado a verle solo como quien puede hacer.

En las diferentes dificultades que se atraviesa en la vida y que sinceramente no falta hemos olvidado que Dios es mucho más que eso, Dios puede hacer por nuestras vidas mucho más de lo que le pedimos, él sabe a la perfección lo que necesitamos; pero Dios es mucho más que eso, él también espera que le invitemos a formar parte de nuestra vida, a celebrar junto a nosotros que estamos vivos gracias él.

Invitar a Dios en nuestras vidas nos obliga a revisar cómo estamos llevando adelante esta que es nuestra vida; nos obliga a pensar en nuestros errores y de ser posible a enmendarlos pero sobre todo nos lleva a retomar viejos conceptos que de pronto y con la prisa de la vida hemos dejado olvidados.

Invitar a Dios en nuestra vida es dejar que Dios nos devuelva esa condición de "seres humanos" que hace que miremos este mundo desde lo que podemos hacer por el y no lo que podemos obtener de el.
La vida y el trajín de la misma nos ha llevado a olvidarnos que somos seres "humanos" y no unas máquinas de hacer dinero, de poder o de placer.

Este mundo esta como esta porque las personas han dejado de incluir a Dios en sus vidas y mucho más en sus corazones, hoy la búsqueda desenfrenada de los bienes materiales, el dinero, el poder, la "belleza" ha reducido nuestros corazones al punto que ya no somos capaces de sentir amor ni siquiera por nosotros mismos; que decir siquiera de sentirlo por los demás.

Miramos a un Dios ausente de nuestras vidas, solo para pedirle lo que creemos necesitar, pero ¿cómo vamos a saber lo que necesitamos si no nos conocemos a nosotros mismos?, tenemos una idea de lo que nos hace falta, en función a lo que vemos que necesitamos para ser felices en este mundo, pero no tenemos idea de las personas que somos, de esa persona que Dios creo y a la que conoce a la perfección, esa persona que Dios esta esperando que se reencuentre consigo misma y desde sus posibilidades empiece a sanar este mundo que esta a punto de perderse.

Hoy no podemos ser libres de asistir ni siquiera a un simple partido de football sin tener que pasar por varios controles policiales, es tanta la inseguridad que vivimos que las medidas de seguridad se incrementan para evitar que haya otra muestra de terrorismo, violencia o delincuencia; ¿es realmente ese el mundo que queremos dejar a los niños?. 
Nuestra infancia fue tan distinta; las comidas en familia no era algo que sucedía solo en cumpleaños o fiestas de fin de año, uno podía ir con su padre a ver un partido de football con la única seguridad de tenerlo cerca, la preocupación era saber si a nuestro equipo le iría bien en el clásico.

Lo cierto es que Dios hoy esta muy presente en nuestras peticiones, pero que ausente esta de nuestros corazones; las personas piensan que una importante cuenta en el banco les dará seguridad a ellos y a sus hijos, pero el dinero escasamente consigue asegurar el pan de cada día.
La única forma de empezar a sanar este mundo, es invitando a Dios para que forme parte de nuestras vidas, para que vuelva a enseñarnos el camino; para que los niños puedan jugar libres sin tener que encerrarlos en una máquina donde también duermen sus sueños.

Estamos tan cerca del adviento, quise hoy compartir un poquito de este tema que es la Fe como un camino para acercar nuestros corazones un poco más a Dios para que el nos recuerde las personas que él soñó que un día seríamos......

Que esta semana ayudes a que este mundo mejore aunque sea un poquito, recuerda que pequeños detalles cuentan grandes historias!!!. Hasta la próxima.



domingo, 15 de noviembre de 2015

PODER "VER" ESE CAMINO

Amigos, Bienvenidos!!!:
¿Cómo les va?, ahora si empezamos a contagiarnos todos de esa maravillosa magia que encierra la navidad!!!. La ciudad empieza a vestirse de navidad (por las razones que sean) pero lo cierto es que nada le impide al corazón soñar con un poquito de esa magia, albergar la ilusión de que pueda producirse un milagro y ¿por qué no?, si para Dios todo es posible!!!.

Con el exceso de actividades que he tenido en las últimas semanas, casi no he podido dedicarme a la escritura que es lo que disfruto más; sin embargo he tratado de mantener la continuidad por lo que mi tercer libro ya esta en marcha y con proyectos de escribir un cuarto libro!!!.
Ya casi cerramos este 2015; encuentro que ha sido un año lleno de bendiciones por lo que la gratitud que se expresa con el corazón hacia Dios es infinita. ¿Qué me dicen ustedes?, pues esta semana les invito a que dejen comentarios en esta entrada y compartan las bendiciones que en este año han recibido, vamos que creo con seguridad que las hay y muchas!!!.

Hace muy poco conversaba con algunas personas como resultado de esta conversación (creo que no hay mejor forma de expresar lo que uno piensa que dentro de una conversación) me dí cuenta que a veces las personas creemos que existe una sola forma de llegar a donde queremos, lo cierto es que encerramos tanto nuestra visión que de pronto nos parece que existe un solo camino; y en este esfuerzo que realizamos por aferrarnos a la que creemos es la única posibilidad de éxito, a veces terminamos por lastimar a quienes tenemos cerca o que trataron de tendernos una mano.

Después de haber concientizado este hecho me pregunte ¿qué les lleva a las personas a creer en esto?; pase mucho tiempo tratando de dar una respuesta justa a esta interrogante y la única respuesta que paseo por mi mente es la falta de fe.
¿Alguna vez escucharon la expresión "Todos los caminos conducen a Roma"?, estoy segura que sí y ciertamente la vida no esta muy lejos de este parecer; pero ¿qué tiene que ver la fe con todo esto?, lo cierto es que tiene mucho que ver pues ya reza aquella conocida canción: "si tuvieras fe como un granito de mostaza", comprenderíamos que no hay sueños que se pierdan, para obtener o mantener un trabajo no se necesita traicionar o perjudicar a nadie, ¿por qué les digo esto?; porque es algo que uno puede ver mucho en estos tiempos y esto se debe primordialmente al temor que uno alberga en su interior.

Una vez escuché que el temor es la oración al mal creo que es cierto, uno siente miedo porque no esta seguro de su fe; si confiáramos en Dios aunque sea un poco, nuestro caminar seria más seguro; no estaríamos expuestos al azar, porque nada esta suelto al destino, lo cierto es que todo absolutamente todo esta supeditado a la voluntad de Dios y es precisamente gracias  a esa voluntad que las personas que "viven" con fe confían en que todo siempre sucede para bien, es difícil desesperarse cuando uno confía.

Resulta que tener un sueño nos lleva a intentar de mil y una forma la realización del mismo, muchas veces incluso se esta muy cerca de obtenerlo pero cuando las circunstancias de la vida nos arrebatan esa oportunidad que nos costo encontrar, entonces ¿qué sucede?; parecería que el suelo que pisamos desaparece bajo nuestros pies, han sido tantos los años que veníamos intentando realizar ese sueño largamente esperado que sentimos que ya no tenemos las fuerzas para continuar una vez mas.
No tardan en llegar la tristeza y la depresión pero ¿qué pasaría si comprendiéramos que todo sucede para bien?, esto solo se consigue cuando somos capaces de demostrar y sentir nuestra fe.

Un suceso grande o pequeño altera nuestra paz y nuestro bienestar al punto que no sabemos qué hacer, nos desanimamos, sufrimos cuando en realidad lo que debemos hacer es aceptar la voluntad de Dios y confiar en que él sabe lo que hace; el que una puerta se haya cerrado no significa que no se vaya a abrir otra y tampoco significa que suceda de inmediato, pero sí sabemos y podemos estar seguros que Dios sabe lo que queremos porque se lo hemos confiado y que él nos lo facilitará en el momento indicado, a veces es mucho más necesario que alcancemos madurez espiritual para poder ayudar a más personas cuando sea preciso.

Sea para buscar la realización de un sueño, conseguir un trabajo o mantener una relación amorosa, tener siempre en mente que nada que se haya conseguido forzando una situación, haciendo daño o traicionando a alguien es para nuestro bien, porque cuando sea para nosotros llegara a nuestra vida de la forma más sencilla y transparente como lo es todo lo que pertenece a Dios.

Comprendo que cuando uno ansía mucho algo, es difícil comprender lo que les digo o aceptar que a veces tenemos que postergar nuestros planes porque eso es lo que quiere Dios, pero nuestro verdadero esfuerzo radica precisamente en el hecho de confiar en Dios y jamás cansarnos de esperar en él, porque para él todo es posible; solo necesita que confiemos en él.

Si tuviéramos fe como un granito de mostaza comprenderíamos que para llegar a donde queremos hay muchos caminos y que Dios sabrá mostrarnos cuál es el indicado, que solo la calma que nos transmite la fe nos dará claridad para poder ver "ese" camino.

Que jamás pierdas la esperanza!!!. Hasta la próxima.

"La FE es garantía de lo que se espera, la prueba de las realidades que no se ven"
(Hb 11,1)

domingo, 8 de noviembre de 2015

ESTAN LLENOS DE COLORES!!!

Amigos, Bienvenidos!!!:
¿Cómo han iniciado el mes de noviembre?, estamos a tan poco de terminar un año más; sin embargo la vida puede cambiar de un minuto a otro; y esto no precisamente significa que vaya a cambiar a mal, las cosas buenas suceden todo el tiempo, a Dios hay que ayudarle confiando en él; recuerden la fe nos debe dar la confianza de que Dios obrará en nuestras vidas aunque muchas veces no entendamos Cómo.

En estos días he comprobado una vez más que las cosas siempre suceden en el tiempo que Dios dispone; nosotros podemos planear hacer una u otra cosa determinada, pero el tiempo es algo que le pertenece solo a Dios, incluso nuestro tiempo.

Y esto debe ser algo que lejos de sorprendernos o desanimarnos debe llenarnos de optimismo. ¿Alguna vez han escuchado o han leído la frase: "Para días grises paraguas de colores"?, esta vez hago uso de esta frase para nuestros pensamientos y es que muchas veces nos vemos inmersos en pensamientos tristes o de reproches, nuestra vida desde este punto de vista parecería ser un cúmulo de eventos tristes, de eventos amargos o simplemente difíciles.

Para esos momentos en los cuales sin darnos cuenta siquiera, empezamos a sentir cómo las lágrimas asoman por nuestros ojos, recordar que a los pensamientos también hay que llenarlos de colores, nuestra vida no es una sucesión de malos momentos, todo lo contrario!!!.

Son demasiados factores los que inciden en nuestros pensamientos, desafortunadamente este mundo esta lleno de razones para pensar que estamos muy lejos de agradecer la vida que tenemos. Sin embargo y en buena medida debemos ser capaces de distinguir que muchos de esos pensamientos que generan amargura, no muestran la realidad de nuestras vidas.

Hace falta que como un ejercicio que uno puede hacer a diario; al terminar cada día repasemos las cosas buenas que sucedieron, nos sorprenderá darnos cuenta que nuestro día estuvo en buena medida lleno de cosas buenas, aunque pequeñitas fueran.

Siempre hay algo por lo cual agradecer y sentirnos vivos; las cosas malas evidentemente llegan haciendo mucho ruido; es tanta la parafernalia que hacen que siempre acaparan nuestra atención, y la vida no sería la misma si no tuviera un poco de bueno  y otro poco de malo; pero eso no significa que no hayan momentos buenos, agradables y felices.

Uno siempre puede recordar a la perfección el momento en que se hizo una herida o se lastimo, pero no  recuerda con tanta precisión el tiempo en el que se curó, ¿cierto?, esto siempre ha de ser así mientras no seamos capaces de cambiar nuestra forma de ver las cosas; las personas tendemos casi siempre a ver lo malo, y es por esta misma razón que el dolor se plasma en el alma mucho más rápido que el bienestar.

Cambiar esto en nuestra mente no es algo que vaya a suceder de un día para el otro, se tiene que trabajar de a poco; día a día; hasta que poco a poco iremos viendo con mucha más claridad que nuestra vida esta llena de momentos buenos, que fuimos felices muchas veces, que nos permitimos reírnos a carcajadas muchas veces.

Las cosas buenas suceden solo tenemos que prestar más atención hasta que un día ya no haya que buscarlas con lupa, hasta que sean visibles a simple vista.

Que esta semana respetemos los tiempos de Dios y vayamos poco a poco ganándole terreno a esa tristeza y ese mal humor que nos produce el no ser capaces de ver que nuestros pensamientos y nuestros recuerdos: ESTAN LLENOS DE COLORES!!!. Hasta la próxima.





domingo, 1 de noviembre de 2015

GRACIAS POR TANTO

Amigos, Bienvenidos!!!:
Hoy primer día un maravilloso mes, gran inicio con la fiesta de todos santos y el día de difuntos!!, de esta forma tan festiva y algo nostálgica iniciamos 30 días nuevos que tenemos por delante para continuar escribiendo la historia de nuestras vidas, estamos a punto de culminar un nuevo capítulo, ¿qué es lo más valioso que recordaremos de él?.

Siempre que llega el día de difuntos; y veo a las personas armar las mesas para sus difuntos, llenarlas de flores con tanto esmero, acudir a los cementerios recordando lo que a ellos les gustaba en vida, recordando muchas anécdotas; esa extraña mezcla de alegría y tristeza pero también de mucha esperanza e ilusión al imaginar que sus seres queridos gozan del permiso de Dios para visitar por lo menos un día al año a quienes amaron en vida.
Si bien el día de difuntos es un celebración religiosa, es a la vez una costumbre popular por la forma en la que se la celebra en distintos lugares del mundo.

¿Qué es lo que yo pienso?, que es una fiesta más para quienes amamos mucho a quienes partieron a la presencia de Dios, porque nos permite soñar con que estos maravillosos seres que llenaron de felicidad y de luz nuestras vidas regresan para visitarnos cada año, al menos un día.
Desafortunadamente la muerte siempre nos agarra desprevenidos; creo que uno jamás esta preparado para despedir a alguien querido; aún cuando sabemos que Dios en su infinita misericordia nos reúne en la vida eterna; la muerte siempre llenará nuestro corazón de una profunda congoja, pues sabemos que no volveremos a verles, que no volveremos a reír con ellos y solo Dios sabe la falta que nos hacen en el cotidiano vivir.

Lo cierto es que yo elijo creer que cada año tenemos la oportunidad de celebrar a todos aquellos que amamos en vida, de invitarles la comida de su predilección de adornar la mesa con flores, hay tantas formas de celebrar este día en el mundo y al final todo se une por el amor que sentimos por ellos.
Yo creo que el mundo se desarrolla más en ese espacio desconocido por una gran mayoría al que llamamos mundo espiritual; por lo tanto no resulta difícil creer que tal regalo de Dios sea imposible.

¿Qué si los difuntos regresan a la tierra cada año? yo creo que si; por ello es importante dejarles una buena impresión y no me refiero a lo fastuoso o abundante que sea su bienvenida; me refiero a ese limpiar nuestra alma de todo vestigio de pena, después de todo ahora ellos pertenecen al mundo espiritual, las cosas materiales no son relevantes ellos verán cómo estamos espiritualmente.

Por eso es importante que cada año renovemos nuestro espíritu, que limpiemos el alma y el corazón de  todas esas heridas emocionales, que de la pena y la amargura seamos capaces de sacar bienestar y gratitud de tal manera que cuando ellos nos vean se reencuentren con la personas que fuimos y más; porque nos verán más fortalecidos, más alegres aunque nunca se deja de echar de menos a quien se amó un día......

Solo quien tiene un corazón noble capaz de amar puede comprender la inmensa pena con la que el corazón se inunda cuando un ser querido ha partido a la presencia de Dios; yo sinceramente creo que la muerte de un ser amado es indudablemente la mayor pena de todas y aunque en el fondo de nuestro corazón quienes hemos pasado por esta dolorosa experiencia; sabemos que ese ser amado esta en un lugar mejor, lloramos porque sabemos que el mundo que conocimos no volverá a ser el mismo....

Las personas son únicas e irrepetibles; la pérdida de una de ellas es una perdida irreparable por eso Dios comprende en su infinita misericordia nuestra pena, quizá él mismo sintió esa pena irreparable cuando nos envió a este mundo y por ello nos regala un día, un solo día cada año para rodearnos de sus presencias, para hablarles con el alma, para contarles cómo ha sido este tiempo, pero sobre todo para demostrarles con nuestra vida que estamos bien, que continuamos nuestro camino hasta donde Dios diga, y que fue gracias a que ellos llenaron de luz nuestro camino el tiempo que vivieron en este mundo que nosotros pudimos continuar afianzados en su recuerdo...... 

Que hoy y mañana los recibamos con el corazón lleno de alegría y que las palabras que resuenen en nuestra alma sea: GRACIAS POR TANTO

Recuerden que no es la muerte la que nos quita a nuestros seres queridos.. la vida sí que no los quita muchas veces y para siempre.